2x05. Cathedral High School

Sophia
Semana de la moda 59 Festival de Venezia - Roma 10:45 a.m

Focos, flashes de cámaras, pantalla gigante de fondo, música, todo preparado...en 3 segundos los flashes de las cámaras se empezaron a disparar, la música comenzó y las modelos comenzaron a desfilar por la gran pasarela inagurando un año más el 59 Festival de Venezia. Este año se contaba con diseñadores como Roberto Cavalli, Sergio Tachini, Nicola Trussadi, Fausto Sarli y con la colaboración de Alberta Pilati y Sophia Dixon. Comenzaba el primer desfile mientras críticos y amantes de la moda, alrededor de la pasarela, sentados, tomaban nota de los modelitos que se estaban presentando. Mientras que por el backstage todo era un caos...

Sophia - ¡¡¡¡ NOOOOOO ROBERTO !!!! ¡Che non è giusto! ¡te equivocaste! primero sale Margherita, Chiara, Sarah, David, Melvin,...y los últimos están bien! No los corrigas! ¡Recuerda que falta el vestido rojo de Chiara, está de camino! Tú te encargas! Menos mal que somos los últimos en desfilar...

Agarré un par de perchas con la ropa del desfile que estaban colgadas en un perchero y fui con ellas hacia otra aparte donde estaban las modelos que desfilarían con mis diseño. Sí, lo había conseguido, después de estudiar durante unos meses en la escuela de moda de Milán, había conseguido mediante un concurso ser elegida para participar en el 59 Festival de Venezia y aunque era mi sueño estaba con los nervios y el estrés a punto de colapsarme y tirar todo por la ventana, porque siempre faltaba algo, nada iba a salir perfecto un día cómo hoy, faltaba por traer un vestido, uno de los modelos se había enfermado y en una hora tuve que conseguir a otro, maquilladoras, peluqueras, los modelos, todos estaban detrás arreglando los últimos detalles. Dejé los trajes encima de un sillón, el grupo de modelos estaba ahí y quería decirles unas palabras

Sophia - Muy bien chicas guapas y chicos más guapos aún, escucharme medio segundo, muchas gracias por hacer que todo esto salga bien, salir a la pasarela, darlo todo, y desfilar como sabeis, ¿ok? Gracias, gracias, gracias!

Dije eufórica dando palmadas y alejándome de ellos mientras les guiñaba un ojo. La mañana transcurrió rápidamente y tan pronto como todo acabó, se terminó de recoger y demás me fui para mi coche con un montón de bolsas de mis creaciones, que según había escuchado habían gustado mucho a los críticos y posiblemente pronto podría tener noticias, muy buenas noticias. Guardé las bolsas en el maletero y me subí al coche, me miré al espejo y me arreglé un poco el pelo, saqué el carmín y me puse en los labios, lo guardé y encendí la música, bajé la ventanilla y eché marcha atrás para salir de donde había aparcado

- Attendere Sophia!!!

Saqué un poco la cabeza por la ventanilla y Roberto, mi ayudante venía corriendo hacia mi coche

Sophia - ¿Qué ocurre Roberto? Después de todo el estrés que tuvimos esta mañana y los gritos que te pegué me echas de menos?

Dije bromeando un poco, le saqué la lengua y reí

- Se te olvidaban estas cartas y un par de tarjetas de agentes que me dieron entre la multitud de gente al terminal el desfile

Las cogí y las dejé en el asiento de al lado

Sophia - Oooh qué divino! Grazie Alberto! Scusa pero tengo que irme ya, tengo que llevar las cosas al almacén y estoy deseando tumbarme en ese gran sofa al que amo tanto! Ya hablaremos, te llamare! Ciao Roberto!

Le tiré un beso y salí de allí. Llegué a mi estudio cargada de bolsas y las dejé encima del sofá, me quité el abrigo y cogí las cartas y tarjetas que me había dado Roberto, eché un vistazo a las tarjetas, luego más tardaría les llamaría, tenían nombres y apellidos interesantes, aunque claro, todos los apellidos y nombres italianos me parecían importantes. Facturas...más facturas...Abrí el frigorífico y saqué una botella de cerveza, abrí el cajón, saqué el abridor y la abrí, le di un trago largo y seguí viendo las cartas...otra factura, mi amiga Susan, qué genial, alguien se acordaba de mi y...¿Qué era esta carta? ¿en blanco? Dejé la cerveza encima de la encima y abrí la carta, saqué lo que había dentro y con la otra mano cogí de nuevo la cerveza le di otro trago y empecé a caminar hacia el sofá mientras leía...



Dejé caer la botella de cristal de cerveza al suelo que se rompió del golpe y me quedé pálida. ¿que qué? Leí de nuevo la carta perpleja. ¿Era esto una broma de mal gusto? Estaba a 80 mil kilómetros de New York! Hacía meses que no sabía nada sobre el Saint Patrick y... ¿a qué venía esta carta anónima? Bueno...me dejaba ver un seudónimo, muy amable por el bromista llamado El Fénix, pero no me había hecho ni puta gracia la cartita. La arrugué en una bola y la lancé a la papelera que ni por asomo entró dentro, me puse a recoger el desorden que había montado con la cerveza dejando de lado esa broma de la cartita que ni gracia tenía...



- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - .

Unas horas después...
20:41 de la noche

Salí de la ducha y me enrollé en la toalla, me acerqué al espejo y quité con mi mano el vaho del espejo. Cuando terminé de arreglarme el pelo salí aún envuelta con la toalla del baño y fui hacia el frigorífico, abrí la puerta y me agaché un poco para coger un refresco, a mi izquierda estaba la pelotita de papel que había hecho de la carta anónima que había recibido, la cogí pensándomelo dos veces y la abrí de nuevo aún de cuclillas, la leí de nuevo...hoy al anochecer...kilómetro 147 de la carretera 15A...me levanté y me giré para ver la hora en el reloj, eran 8 menos 20, me daba tiempo de ir y ver qué coño era esta bromita, porque tenía curiosidad en realidad y no sabía de quién podía haber sido...Cerré el frigórifico rápidamente y me fui hacia la cama, me arreglé y en 10 min estaba fuera del estudio en mi coche. De camino pude llegar a pensar mil cosas sobre qué significaba ese anónimo pero no podía dar con ninguna. No estaba muy lejos de la ciudad, sólo a las a fueras, debería de haber avisado a Roberto sobre esto, aunque incluso llegué a pensar que era una broma de las suyas pero no recordaba haberle contado sobre mi pasado en ese colegio. Conduje un poco más hasta llegar al kilómetro 147...dejé las luces del coche encendidas y me bajé lentamente. Tragué saliva porque me recorrió un escalofrío por todo mi cuerpo cuando levanté la vista y pude ver...¿una iglesia? no era una iglesia normal, estaba abandonada...y no se escuchaba un alma por esa carretera a estas horas. Podía pensar coherentemente, dar media vuelta, entrar en el coche de nuevo e irme por dónde había venido...pero no. La curiosidad mató al gato me dijeron un día. Qué lástima que no haga caso a las personas que me lo decían. Como llevaba la ventanilla bajada, entré la mano y saqué las llaves, lo que faltaba sería que por casualidad pasase alguien y me lo robase, también agarré una linterna que llevaba siempre en la guantera del coche. Las guardé en mi bolsillo y di unos pasos hacia la iglesia...¿seguro que estaba abandonada? Tenía un aspecto viejo, con grietas en las paredes y ramas de plantas colgadas por ellas también. Me acerqué hasta la puerta y puse lentamente mi mano en ella...muy bien, era un gran paso, estaba acojonadísima aunque sólo hubieran pasado 5 segundos desde el coche hasta la puerta, tomé aire y empujé poco a poco la puerta mientras escuchaba el chirriar de la misma, entré un pie y luego el otro y entré finalmente aún sujetando la puerta que era un poco pesada. Me fijé en el interior de la iglesia, los cristales estaban completamente rotos y por ellos la luz de la luna entraba e iluminaba un poco la capilla, no demasiado, pero para eso estaba la linterna, intenté encenderla con una mano pero se me resistía, solté la puerta sin darme cuenta para intentar encenderla cuando dio un fuerte golpe al cerrarse de una, pegué un salto y grité como nunca había gritado del susto haciendo que la linterna cayese al suelo y se le saliesen las pilas.

Sophia - Genial, genial, genial...esto sólo pasa en las películas joder...

Agarré una pila y la metí en la linterna, me agaché para coger la otra cuando de repente un gató negro pasó por mi lado corriendo y maullando asustándome y haciéndome caer de culo antes de que consiguiera coger la otra pila

Sophia - Dime que no era negro el gato...dime que no era negro...joder, joder, joder,... ¿por qué coño hago caso de estúpidos anónimos y vengo a la casa del terror? ¿Por qué...?

Dije sollozando un poco, casi muerta de los sustos, pero conseguí meter la pila y encender la linterna al fín

Sophia - ¡ALELUYA!...UYA...UYA...UYA....

Grité y el eco continuó, me puse de pie rápidamente y miré a todas partes enfocando con la linterna...no sabía cómo estaba haciendo esto si durante toda mi vida había tenido pesadillas pensando que dentro de mi armario vivía el montruo más aterrador del mundo, no me conocía ni a mí misma. Caminé un poco entre el pasilla que daba desde la puerta hasta el altar, entre los bancos lentamente pero escuché otro ruido, me giré rápidamente enfocando a todos lados

Sophia - ¡JODER! ¿Quién anda ahí? ¿Quién eres? ¿El Fenix?

Dije gritando y el eco imitaba mis últimas palabras

Sophia - ¡Basta ya! ¿Qué es esto? ¿QUIÉN ERES?




Sophia Dixon returned...Gracias Iris por la foto estaré eternamente agradecida
Sobre El Fenix, será Leandro quién se encargue de escribir con él un par de mensajes, todo hablado con Marta
Y Marta...mañana subiré la matrícula y biografía de Sophia, ok?

Dean(con Michelle y Taylor)

Michelle pareció ser quién llevaba la voz cantante, la más lanzada aunque ninguna de las dos parecía tener un gramo de timidez, pero Michelle fue quien consiguió sentarse en el asiento del acompañante, y quién indicó a dónde debíamos ir, aunque la idea del Rockefeller no me gustó para nada, debía complacerlas. Tal como me imaginé, por estas fechas y a esta hora, la zona era una jungla impenetrable de gente, pero afortunadamente, nuestra guía también era capaz de encontrar lugares donde estacionar, así que sin dudarlo demasiado, maniobré hasta meter el auto en el pequeño espacio, tal vez demasiado pequeño para mi auto, pero afortunadamente no perdí ni siquiera mi orgullo al poder estacionarlo allí en solo dos maniobras. Las chicas se apresuraron en bajar.

- Denme un momento ¿Sí? Aquí el estacionamiento es medido y tengo que meter las monedas en el parquímetro a menos que quieran ver esta belleza remolcada en navidad.

Dije acariciando suavemente la superficie de mi impala descapotable. Después de meter las monedas fui detrás de las chicas, poniendome en medio de ellas y pasando un brazo por detrás de la cintura de cada una.

- ¿Se dan cuenta de que aquí afuera solo son dos chicas atractivas divirtiéndose con un chicho no mucho mayor que ellas, cierto? Aquí en esta jungla de cemento los roles de profesor y estudiantes no valen de nada... a menos que los consideren algún tipo de fantasía, y no estoy en contra de eso de ninguna manera.

Les guiñé un ojo y reí.

- Pero bueno, primero lo primero... Ya que tú nos trajiste aquí, Michelle, guíanos hacia el muérdago así podemos largarnos en busca de esas cervezas, ya estoy empezando a... desearlas... a las cervezas, digo.

Mantuve mi sonrisa mientras seguía caminando guiado por ellas, aunque realmente quería terminar rápido el asunto del muérdago.

Lucas(con Elle)

Después de hacer un llamado que me resultó bastante curioso, Elle me explicó de qué se trataban sus planes.

-Tengo un amigo... un señor mayor al que le compro el material para pintar, él mayor fan que se puede tener, y de vez en cuando vende cuadros mios. Le deje millones de dibujos para que seleccionara cuales debia vender, es un critico de arte fabuloso. Y bueno, el tiene todos los dibujos tuyos... y me gustaria que si no te los quieres quedar, al menos los veas.

- ¿Le dejaste a un tipo que ni conozco una pila de dibujos de... mi?

Me reí.

- Bueno, sinceramente, me interesará más cuando vea que otros dibujos le dejaste, porque si sigo viendo cómo me dibujas, se me va a subir el ego.

Mantuve mi sonrisa mientras tocaba juguetonamente la punta de su nariz con un dedo.

- Además, no son realistas... me dibujar muy idealizado, muy perfecto. Tienes que ponerle más atención a mis defectos. ¡Mira mi nariz! No es esa nariz bonita que haces en tus dibujos.

Entrecerré los ojos mirándola en un reproche bromista y reí, antes de tomar un trago de mi chocolate. Me quedé pensando un momento.

- ¿Sabes? Creo que tengo una idea de dónde te llevaré yo nuestra próxima... cita... si quieres llamarla así. Ya que la próxima me tocará a mi elegir a dónde ir, tal vez pueda conseguir que mi madre me deje usar el automóvil y llevarte un sábado o domingo que tengamos libre, a un lugar que conocí mientras estuve en la escuela militar. Te encantará. Y de regreso de allí, quiero que pasemos a ver a unas personas... Bueno, no quiero adelantarte nada, será una sorpresa.
Will(con Summer)

Apenas crucé la puerta de la biblioteca aceleré mi paso para alejarme de allí lo más rápido posible y dejar el papelón en el pasado. Solo quería llegar a mi habitación y olvidarme de lo que pasó, o si no podía al menos tratar de entender qué es lo que había hecho, pero seguía escuchando la voz de Summer llamándome. ¿Estaba alucinando? No, escuchaba su voz, pero... ¿Qué hacía ella siguiéndome? Pensé que que quedaría ahí insultándome por cómo le hablé. Al final después de gritarme un poco me alcanzó y se paró delante mío.

- Nunca fui una buena deportista, sólo aprobé educación física...porque...enseñaba un poco el tanga encima del pantalón y me ponía la camiseta corta de más pero...

Fruncí el ceño sin comprender por qué me había corrido para decirme eso.

- Sólo bromeaba...no tienes que ponerme esa cara, ¿vale?

Me encogí de hombros pero no dije una palabra.

- Mira Will...necesito tu ayuda, me han hablado muy bien bien de ti, de tus geniales notas, de todo y...yo necesito sacarme la secundaria sea como sea...estoy repitiendo 3º y reconozco que el año pasado me dejé un poco respecto a los estudios, por eso quiero cambiar... Este año será diferente, quiero aplicarme y aprobar todo...pero sóla no puedo, necesito la ayuda de alguien. Por favor William...necesito que tú seas esa persona... Puedo hacer cualquier cosa por ti...

La verdad no tenía argumentos muy convincentes, perro sabía cómo usar el tono de su voz y sus gestos para intentar convencerme más con sus gestos que con sus palabras. Suspiré bajando la vista y un instante después levanté la cabeza mirándola directo a los ojos, ya un poco más calmado y en control de mi mismo.

- Summer, yo... lamento como te traté hace un momento, estuve fuera de lugar. Lo siento. Pero... no sé si yo soy quién necesitas, seguro que hay decenas de otros... empollones que matarían por pasar un rato contigo aunque fuera solo para darte una mano con tus estudios. ¿Por qué yo?

Pero ella parecía convencida de que yo era el tutor perfecto para llevar sus notas adelante, así que no tenía sentido discutir eso.

- Mira... te daré una oportunidad, pero... tienes que prometerme que cuando yo diga que se acabó y no puedo ayudarte más, se termina y buscarás a otro que te ayude.

Ay, Dios. ¿Por qué tenía que ser tan bueno? A veces me gustaría poder ser más como mi hermano...

- Pero no quiero volver a escuchar la palabra empollón ¿Ok?

Dije con una leve sonrisa, ya bastante más calmado y, debía admitirlo aunque sea para mi mismo, un poco entusiasmado con la idea de poder ayudarla. Aunque también un poco temeroso por lo que eso pudiera significar.

- Y tranquila, lo hago solo como un favor, no te pediré nada a cambio. Después de todo, no creo que tengas nada que ofrecerme que me interese. Bueno, dime ¿En qué necesitas ayuda?

El Fénix
(con Sophia)

No pensé que Sophia fuera lo suficientemente valiente o curiosa para venir, o aún habiendo venido, de entrar a la iglesia superando su prudente temor hacia lo desconocido y hacia lo tenebroso del ambiente. Pero lo había hecho y ahí estaba, en el horario y el lugar pactados, muerta de miedo pero aún así haciendo su mayor esfuerzo por mantener la compostura.

- Has venido después de todo. No creí que fueras a aparecer.

Mi voz resonaba convenientemente en el acústico recinto vacío, así que ella no era capaz de saber de dónde provenía con exactitud mientras yo me mantuviera en las sombras. Me di cuenta que aquello la aterrorizó aún más.

- No deberías dejar ver tan evidentemente tu temor, podría considerarse una muestra de debilidad.

Di un paso hacia adelante desde donde estaba y un grupo de murciélagos que habitaban en un recodo del techo sintieron el movimiento, lanzándose a volar al sentir amenazado su hábitat. Revolotearon chillando por el lugar hasta encontrar una ventana rota por la que salieron veloz y ruidosamente. Sophia aún no podía verme en la oscuridad y seguía buscandome con el haz de luz de su linterna.

- Apaga eso y arrojalo al suelo unos metros delante tuyo. Hazlo o no me dejaré ver.

Ella dudó un momento, podía notar su resistencia a librarse de lo único que la mantenía a salvo de la fría y desconocida oscuridad.

- Puedes confiar en mi, no te deseo ningún mal. Deja la linterna o este encuentro acaba aquí mismo.

Cuando ella finalmente se decidió a librarse de la linterna, pude notar el gran paso que eso había significado para ella. De repente, a su derecha, entre dos columnas, apareció una pequeña llama de fuego que se mantuvo cortando bruscamente la oscuridad y dejando ver únicamente la mano oculta en un guante de cuero negro que sostenía la llama. Levanté la mano hasta la única vela de un candelabro que pendía de la pared rocosa de una de las columnas. Volviendo a bajar la mano, di un paso adelante hacia la luz de la vela. Todo lo que podía verse de mi era la amplia capa de tela gruesa y pesada que cubría por completo mi cuerpo, y la capucha de la misma que ocultaba mi cara en sombras.

- Has sido muy valiente en venir hasta aquí, Sophia. Puedes llamarme Fénix.

Podía notar su impaciencia para que le dijera de qué se trataba todo esto.

- La verdad es que me encantaría poder sencillamente decirte lo que desees saber y responder tus preguntas, pero no es tan simple. Hay mucho más detrás de lo acontecido en Saint Patrick de lo que tú y todos creen. Y si piensas que lo peor ha pasado... entonces no tienes idea de lo que ignoras. Aunque hayas venido en busca de respuestas, lamento decirte que lo que tengo para ti son solo más interrogantes. Debes decidir qué tan grande es tu deseo de descubrir la verdad. Por que la única manera en que verás la luz detrás de estos oscuros acontecimientos, es sacrificando la vida que tienes aquí y arriesgándolo todo por una verdad que tal vez sea demasiado amarga para soportar el trago.

Di algunos pasos adelante, acercándome a ella. Pude notar la incomodidad que le causaba mi presencia, pero ella no quería dejarlo ver.

- Si deseas saber la verdad y salvar a tu gente... tu verdadera gente, en tu verdadero hogar... no aquí, no en Louisiana, sino en el único lugar del que te has sentido parte... deberás arriesgar todo y volver.

Aparté un poco el borde de la capa extendiendo mi mano con un sobre hacia ella.

- Tómalo, no tengas miedo. Tienes 24 horas para decidir si quieres ignorar tu pasado y el futuro de los tuyos y seguir viviendo esta mentira aquí en Europa... o si eres capaz de arriesgar todo por la verdad. Si decides ignorar esto, no volverás a saber de mi, pero si tomas esta oportunidad, estaré presente para acompañarte en el difícil camino y guiarte.

Retrocedí hasta el borde del haz de luz ténue de la vela.

- Debes decidir. Volverás a saber de mi si es necesario. Que Dios te acompañe.

Dicho esto, soplé la vela y en medio de la oscuridad empujé la linterna por el piso, la cual rodó hasta detenerse a los pies de Sophia. Para cuando ella la recogió y encendió, yo ya había desaparecido de allí.



En el sobre hay un boleto en primera clase para el vuelo que sale hacia New York City el Viernes 8 de Diciembre a las 21 hs (o sea el día siguiente) y una copia de la matrícula de ingreso al Saint Andrew's College a nombre de Sophia Dixon.


Creo que el mensaje de lo que el Fénix quiere que haga al dejarle ese sobre es más que directo ¿no? Jaja


Para todos: ¿Quién o qué es El Fénix? ¡Quien lo adivine se lleva un premio! xD

Haley
[ Con Yasie, Ginny, Ron y.. ¿Lori? ]
- A mi me parece bien, ademas la hora que es ya... Yo empezaria por la cafeteria... Aunque me parecio ver un comedor de camino hacia aqui, igual es ese...

Ehh tengo un aliado...yo tambien tengo hambre!...

Me miro y yo me rei.

-bueno...cuando no tengo hambre yo?..-

- Si eso llegara a pasar seguro tendrias fiebre o algo grave deberia estar pasando... al igual que con el café. - Eramos dos grandes fanaticas de la cafeina (??).

- Vamos?

Claro...

Asenti con mi cabeza mientras empezabamos a caminar hacia la cafeteria. A mi tambien me habia dado hambre... mire la hora.. uhm, si, claro... como para que no me de hambre.

- Entonces tutoras? Ginny va floja en mates, no?

En serio?....bueno si quieres yo puedo ayudarte, y Haley tambien...si tienes alguna duda nos puedes pedir ayuda vale?...

- Obviamente - le guiñe el ojo - Para eso estamos, para ayudar ^^

-a mi las mates me van bien...lo que no puedo es con Quimica...se me da horrible!...

- Qué te va mal en quimica? - la mire extrañada - No mientas, Yasie! - mire a los demás.. - Tiene dos o tres puntos menos de lo deceado.. pero si se concentrara más en la materia podria obtener la nota que busca - le saqe la lengua.

Y bueno chicos...aqui esta la cafeteria...podriamos comer y despues continuar...os parece?... si quereis dejamos las maletas aqui en recepción, nos las cuida Kim* (me he inventado el nombre de la recepcionista) y despues las cogemos... Es que me muero de hambre...

- Kim es 100% confiable.

sonrei. Una vez que se decidieron con lo que hacer (??). Prontó llegamos hacia la cafeteria...

- Como ven, esta casi repleta... siempre es así. Tal vez en horarios de clase habra menos gente pero generalmente esta llena.

Buscamos rapidamente una mesa y nos sentamos todos.

- Muchos dirian que el lugar en el cual te sentas en la mesa es de lo más importante... yo no lo digo; Creo que cada uno tiene derecho a sentarse donde quiera.

Me encogi de hombros.

- Además tampoco me gustan las "etiquetas", ya saben... eso de "los que se sientan allá son populares, por allá deportistas, por el otro lado las rapiditas..."

Me rei un poquito cuando pare de hablar.

- Perdón, soy algo aburrida en ese aspecto.

Pero bueno, era verdad. Me gusta conocer a la persona por quien es no por el lugar donde se sienta o el grupito con el que se junta.

- Ahm.. me olvidaba ya - me levante del asiento - Yo ire por los pedidos... aunque unas dos manos más no me vendrian mal de ayuda - hice una mueca divertida - ¿Que van a pedir? - dije apoyando mis manos sobre la mesa mientras esperaba que pidan algo y además que alguien se ofresca a acompañarme xd


*Creo qe las valijas ya las habian dejado en la habitación xD pero wen, no importa... sigo XD


Sebastian(con Ian y Tina)

Tina parecía estar viendo un fantasma, tocaba mi brazo como intentando comprobar que tuviera consistencia y no fuera algo incorpóreo, pero ese toque terminó convirtiéndose en una caricia y finalmente un abrazo. Al final después de recibirme, le dijo a Ian dónde podía estar John Steward.

- Si mi reloj no me falla ahora mismo debería estar en su despacho... Sí, seguramente. Pocas veces deja su despacho y cuando lo hace es por emergencias. La verdad, a este colegio le hacía falta alguien como él.

Knight murmuró algo por lo bajo, refunfuñando y se marchó todavía murmurando algo por lo bajo, sin decir una palabra más. Yo solo me reí mientras miraba la cara de Tina, que parecía no terminar de entender aquella reacción.

- Ian y John tienen un historial complicado, solo digamos que no son los mejores amigos... pero suficiente de ellos ¿Cómo estás tú? ¿Qué ha sido del gran Saint Patrick High School durante todos estos meses que estuve ausente?

Me ubiqué a su lado para caminar a su par, pero antes que dijera nada, levanté una mano como callándola.

- Sé que ibas apurada a ver a tu noviecito el profesor de arte, pero... vamos... Sebastian Snake está aquí, delante tuyo, cuando nadie en este lugar sabía si yo seguía vivo siquiera... ¿No me vas a decir que no soy al menos un poco más importante, por lo menos temporalmente, que lo que tengas que decirle a él?

Sonreí ante su desconcierto... una vez más.

- Sí, lo sé, lo sé... sigo siendo el mismo tipo aterrador, y te da escalofríos estar con alguien a quien miras como a un fantasma, y que además, sigue revelando que sabe más de lo que debería y... bueno, en fin. ¿No me habísa invitado un café? Me muero por escuchar qué ha sido de este triste, triste lugar sin mi...

Pasé descaradamente mi brazo por encima de sus hombros mientras comenzabamos a caminar hacia la cafetería.

- Además tienes que contarme sobre ese romance secreto y a la vez no tan secreto tuyo... Y, dime... ¿Qué ha sido de Jessica? ¿Está con... alguien?

Sophia
En una iglesia abandonada, km147 de la carretera 15A, Venezia, Italia

Esa voz empezó a notarse en la capilla pero no sabía de dónde provenía por mucho que señalase con la linterna alrededor y eso me aterrorizaba. Pero dijo que no debería de dejar tan evidentemente mi temor, porque podría considerarse una muestra de debilidad

Sophia - Si claro, eso lo dices porque eres tú el que me ve a mí y el que me ha metido en todo esto

Un grupo de murciélagos revolotearon por allí hasta salir por una ventana, pegué un pequeño grito mientras buscaba algo en la oscuridad con la linterna pero esa voz decía que la apagase y la tirase al suelo. ¿Perdona? ¿El único objeto que tenía para defender de la oscuridad y quería que lo tirase? ¡Ni en sueños!


- Puedes confiar en mi, no te deseo ningún mal. Deja la linterna o este encuentro acaba aquí mismo.

Resoplé y era lo único que podía hacer...después del mal trago que había pasado para llegar hasta aquí no iba a dejar que esto terminase así sin más. Solté la linterna y la empujé un poco con el pie delante de mi pero esa persona tenía todas las ventajas del mundo y yo no tenía nada, y eso empezaba a preocuparme, a pesar de haberme dicho que no me deseaba ningun mal, eso lo decían todos los asesinos antes de matar a su víctima no? De repente apareció una llama de fuego y encendió una vela, intenté esforzar mi vista para ver en la oscuridad pero era imposible verle, esa pequeña luz de la vela solo me permitía ver era a alguien tapado con una capa de tela negra con capucha que lo ocultaba completamente. Muy bien, me quedó bastante claro que aún no quería salir del anónimato, pero eso me coibía más aún, porque él sabía quién era yo, pero yo no sabía nada

- Has sido muy valiente en venir hasta aquí, Sophia. Puedes llamarme Fénix.

Nada nuevo, eso ya lo sabía, quería saber más, tomé aire tranquilamente, relajándome un poco, aunque me era imposible

- La verdad es que me encantaría poder sencillamente decirte lo que desees saber y responder tus preguntas, pero no es tan simple. Hay mucho más detrás de lo acontecido en Saint Patrick de lo que tú y todos creen. Y si piensas que lo peor ha pasado... entonces no tienes idea de lo que ignoras. Aunque hayas venido en busca de respuestas, lamento decirte que lo que tengo para ti son solo más interrogantes. Debes decidir qué tan grande es tu deseo de descubrir la verdad. Por que la única manera en que verás la luz detrás de estos oscuros acontecimientos, es sacrificando la vida que tienes aquí y arriesgándolo todo por una verdad que tal vez sea demasiado amarga para soportar el trago.

Arqueé una ceja confusa, ¿qué? ¿sacrificar mi vida de aquí? ¿sacrificar mi sueño? ¿Hay más cosas detrás de lo del atentado en el instituto? Dio unos pasos adelante acercándose, tragué saliva intentando matener la postura aunque estaba a punto de gritar y echar a correr pero quería que me aclarase las cosas

Sophia - ¿Qué...quieres decir con eso?

- Si deseas saber la verdad y salvar a tu gente... tu verdadera gente, en tu verdadero hogar... no aquí, no en Louisiana, sino en el único lugar del que te has sentido parte... deberás arriesgar todo y volver.

Este hombre estaba loco, qué le hacía pensar que yo haría algo así. Extendio su mano y me dejo ver un sobre. Le miré y me mordi el labio inferior, no me atrevía ni a alcanzarlo

- Tómalo, no tengas miedo. Tienes 24 horas para decidir si quieres ignorar tu pasado y el futuro de los tuyos y seguir viviendo esta mentira aquí en Europa... o si eres capaz de arriesgar todo por la verdad. Si decides ignorar esto, no volverás a saber de mi, pero si tomas esta oportunidad, estaré presente para acompañarte en el difícil camino y guiarte.

Lo alcancé rápidamente y me eche hacia atrás

Sophia - ¿24 horas? Decidir algo así no lleva tan poco tiempo, estamos hablando de descubrir la verdad sobre un atentado en mi antiguo colegio o quedarme en Italia para hacer relaidad mi sueño....

- Debes decidir. Volverás a saber de mi si es necesario. Que Dios te acompañe.

Antes de dejarme decir nada más la luz de la vela se apagó y la linterna vino hacia mi, me agaché rápidamente y la alcancé, la encendí y enfoque donde estaba el hombre de la capa que había desaparecido repentinamente

Sophia - ¡NO! ¡Espera! ¡Fénix! Joder...

Un ruido que venía de un banco me hizo enfocar, era otro gato, de repente estornudé y recordé mi alergia a esos seres. Tenía que salir de ahí, las aventuras por hoy habían acabado. A paso ligero me acerqué a la puerta, la abrí y salí de ahí. Tenía las manos sudorosas y heladas, abrí la puerta del coche, entré y encendí las luces. Miré ese sobre y lo abrí. Dentro había un pasaje para Nueva York para el viernes 8 de Diciembre a las 21 hs, pero viernes 8 era mañana! y una copia de la matrícula de ingreso al Saint Andrew's College a mi nombre...Me llevé la mano a la nuca pensativa, ¿qué coño era esto?, ¿qué verdad se ocultaba detrás de ese atentado? ¿por qué tenía que ser yo la elegida para esto? ¿qué tenía que ver yo si ni siquiera estaba cuando ocurrió? Demasiadas preguntas y pocas respuestas, sólo un pasaje a nueva york, un cambio de vida, una vuelta al pasado, dejar pasar el sueño de mi vida,...Arranqué el coche de camino al estudio de nuevo, de camino sólo podía preguntarme y preguntarme más cosas, recordar momentos del Saint como flashbkacks, mi primer encuentro con Remy, mis intentos de hacer que rompiera con la peliteñida Ewans, Mia Colluci, Cristiano, la noche de disfraces, lo de la carcel, todo...Llegué al estudio y fui hacia la cama, me tiré encima de ella mirando el pasaje para Nueva York, tenía 24 horas para decidir qué hacer...y no tenía ni idea, era dificil, ¿por qué volver al pasado, a Nueva York, cuando aquí en Venezia tenía todo lo que había deseado? Estaba cumpliendo mi sueño, se habían interesado por mi para poder comercializar mis diseños, había hecho desfiles de moda con ellos, había conocido a gente que merecía la pena,... ¿para qué volver y descubrir una verdad amarga? ¿para qué volver y recordar aquellas muertes que en cierta manera me dolieron? Remy desapareció en el atentado y aunque mi objetivo desde un principio era hacerle daño...no me esperaba para nada ese fín, ni me dio gusto, me sentí bastante mal... ¿por qué volver a todo eso?...no sabía qué hacer...Me quedé ahí tirada, pensativa, recordando

Summer (Con Will)

Bajó la cabeza suspirando, vamos! no me podía decir que no una segunda vez...Levantó la cabeza y me miró a los ojos. Sonreí porque sabía que ahora no me diría que no, si no simplemente se hubiese alejado sin decir nada más

- Summer, yo... lamento como te traté hace un momento, estuve fuera de lugar. Lo siento. Pero... no sé si yo soy quién necesitas, seguro que hay decenas de otros... empollones que matarían por pasar un rato contigo aunque fuera solo para darte una mano con tus estudios. ¿Por qué yo?

Resoplé y le miré

Summer - Ya te dije...eres el elegido y no hay más, necesito tu ayuda, venga porfaa!!

Odiaba este comportamiento y más en lugar público, pero era hacerlo o quedarme de por vida en el instituto

- Mira... te daré una oportunidad, pero... tienes que prometerme que cuando yo diga que se acabó y no puedo ayudarte más, se termina y buscarás a otro que te ayude. Pero no quiero volver a escuchar la palabra empollón ¿Ok?

Sonreí y pegué un saltito de emoción

Summer - No te preocupes!! no te llamaré nunca más empollón!

- Y tranquila, lo hago solo como un favor, no te pediré nada a cambio. Después de todo, no creo que tengas nada que ofrecerme que me interese. Bueno, dime ¿En qué necesitas ayuda?

¿Que yo no tenía nada que le interesase? ¿Perdona? Bueno mejor para mí. Me quedé mirándole

Summer - ¿En qué? Pues...a lo mejor...me tienes que ayudar en...algunas asignaturas...

Solté una leve carcajada y le miré con cara de culpabilidad

Summer - Osea que...quien dice alguna asignatura...dice...todas las asignaturas

Dije lo último rápidamente y sonreí abiertamente

Summer - Ya se que tienes tus cosas, tienes que sacarte tu curso y que ciencias es más dificil que letras pero...necesito que me ayudes...necesito en realidad que me enseñes a...estudiar, trabajar con resúmenes, esquemas, las redacciones,...

Me quedé pensativa y le miré de nuevo

Summer - La verdad es que necesito mucha ayuda. necesito centrarme y terminar 3º, quiero ser una chica universitaria, ¿sabes? También tengo sueños, como todos...

Me encogí de hombros y sonreí

Summer - Entonces...a partir de...hoy...eres mi...tutor?

Tina
(con Sebastian)

Tan pronto como terminé de hablar el inspector Knight se marcho refunfuñando por lo bajo. Miré a Sebastian algo perdida pero él me comentó que entre el inspector y John no había demasiada quimica. Vaya... Seguro que había metido la pata!

- Bueno Sebastian, yo teng...

Antes de que pudiera siquiera hablar él me interrumpió descubriendo mis planes y avergonzandome por el hecho de que prefiriera ir a buscar a Alfie antes que su compañia. Vale, era una mala amiga... por suerte, Sebastian no era de los que se enfadaba fácilmente asi que le sonreí de manera inocente y después no pude evitar reirme desconvertada.

- Como has sabido que yo y el profesor de arte...?

- Sí, lo sé, lo sé... sigo siendo el mismo tipo aterrador, y te da escalofríos estar con alguien a quien miras como a un fantasma, y que además, sigue revelando que sabe más de lo que debería y... bueno, en fin. ¿No me habísa invitado un café? Me muero por escuchar qué ha sido de este triste, triste lugar sin mi...

Le miré de reojo meneando ligeramente la cabeza al estilo "eres incorregible" cuando rodeó mis hombros con su brazo y ´nos hizo girar rumbo a la cafeteria.

- De acuerdo, mi charla con Alfie... Alfred, - me corregí - puede esperar. No siempre regresa alguien al que creiamos, por lo menos, muerto - bromeé aunque hacía unas horas no había sido ningun tipo de broma.

- Además tienes que contarme sobre ese romance secreto y a la vez no tan secreto tuyo... Y, dime... ¿Qué ha sido de Jessica? ¿Está con... alguien?

- No tenías que preguntar por lo mio si querías saber de Jessica - dije con tono entre bromista y de listilla - Te lo iba a contar igual... cinco segundos más y te habrías evitado la pregunta.

Me deshice de su brazo para empujar la puerta de la cafetería con las dos manos, desde la distancia le pedi dos cafés a Martha y después, nos sentamos en una mesa apartada de los alumnos. Martha, en cuanto vio a Sebastian lo saludó con un abrazo y después de dejarnos los cafés se alejó para seguir con su trabajo.

- Querias saber sobre Jess, asi que no te haré esperar mas - rodeé la taza con mis manos - y no te pienso engañar. Tu desaparición le afectó y tengo que decir que más incluso de lo que yo me había imaginado... Seguramente te parezca increible, por razones obvias, -Jess era una preciosidad de mujer - pero desde que comenzó el curso no ha estado con nadie y no porque no tenga o haya tenido pretendientes - le di un trago al café - Sólo que no tiene ganas, no le apetece... - suspiré cansada de las propias excusas que Jess me daba - Ninguno eras o eres tú - ahora que el si estaba vivo me estaba empezando a enredar con los tiempos verbales - ASi que... bueno, no se que intenciones tienes ahora que has regresado pero, hagas lo que hagas ... bueno, está muy sensible - una muerte que no era muerte del hombre al que querias y que ahora regresaba sin saber con que intenciones - asi que intenta no hacerle daño.

Separé una de las manos de mi taza y la apoyé encima de una de las de Sebastian.

- Te lo pido como un favor... - le dije con una sonrisa - y te lo pido porque incluso hoy me ha hablado de ti y la relacion que teniais. Me dijo que me arriesgara con el profesor de arte porque ella no lo había hecho y ahora estaba arrepintiendose.

Le di unos golpecitos en la mano y sonreí. Sí, Jess todavía estaba colada por él.

Michelle
(con Dean y Taylor)

Nada más entrar en el Rockefeller la actitud de Dean cambió por completo. Hasta hacía un momento, aunque confiado se había mantenido al margen. Ahora y como si cruzar las puertas giratorias hubiesen influido en él , estaba más relajado incluso juraría que estaba coqueteando e intentaba sacarle hierro al asunto con la idea de que nadie nos conocia dentro de esas cuatro paredes.

- Pero bueno, primero lo primero... Ya que tú nos trajiste aquí, Michelle, guíanos hacia el muérdago así podemos largarnos en busca de esas cervezas, ya estoy empezando a... desearlas... a las cervezas, digo.

- Que pena que sea a las cervezas - bromeé siguiendole el juego con una sonrisa de medio lado - estaba dispuesta a llevar a cabo la fantasia de profesor y estudiante... bueno, otra vez será - rei.

Miré a Taylor sonriente poniendome a su lado en el momento de comenzar a subir por las escaleras mecaninas .

- Es mono, verdad? - le susurré al oido mirando a Dean, quería que supiera que hablaba de él - Una pena que Jason sea su hermano. - me mordí el labio y después mire al frente para dar un saltito y girar hacia la izquiera, justo para llegar a la tienda de decoración navideña mas importante y grande de Nueva York.

La tienda, en estas fechas estaba rebosar de gente asi que no era demasiado fácil ver donde estaban las bolas, el espumillón, las guirnaldas ... o el muerdago que era lo que nosotros buscábamos.

- Creo que lo mejor será separarnos - les dije - Esto es demasiado grande y si vamos juntos tardaremos demasiado. ¿Nos encontramos aqui en 10 minutos ?- Miré hacia los lados y de nuevo a ellos dos - yo voy por este pasillo - dije señalando el de mis espaldas.

Sebastian (con Tina)

Al final no costó convencerla de ir a tomar algo, ya que ella misma se había metido en ese aprieto al invitarme un café, aunque fuera tal vez solo para librarse de Knight... Pero yo no me iba a perder la oportunidad de hablar un poco con ella. Una vez en la cafetería, y después de un efusivo y algo vergonzoso saludo de Martha, nos sentamos a tomar el café y conversar. La verdad es que extrañaba este lugar y los momentos tranquilos como este. Tina me contó acerca de Jessica. A diferencia de lo que yo hubiera imaginado, parece que ella se había tomado bastante en serio lo nuestro y le había afectado mi desaparición. Por decisión propia no había estado con nadie más.

- Asi que... bueno, no se que intenciones tienes ahora que has regresado pero, hagas lo que hagas ... bueno, está muy sensible asi que intenta no hacerle daño. Te lo pido como un favor... y te lo pido porque incluso hoy me ha hablado de ti y la relacion que teniais. Me dijo que me arriesgara con el profesor de arte porque ella no lo había hecho y ahora estaba arrepintiendose.

Ella había apoyado una mano sobre la mía, y pude notar que decía muy en serio aquello. Sonreí tranquilamente, intentando transmitirle mi calma.

- Tranquila, Tina, seré cauteloso, no tengo intenciones de hacerle daño. Es por eso que he decidido hablar primero contigo, y preguntarte a ti por ella... Bueno, en realidad, fue más bien el destino lo que nos cruzó, sin que te buscara, pero por algo será.

Le guiñé un ojo y di vuelta mi mano que ella sostenía y tomé la suya.

- La verdad es que no sé qué hacer... No quiero aparecerme como lo hice contigo, no sé cómo pueda reaccionar ella, especialmente si piensa que yo estoy muerto.

No quería ahondar más en ese tema o comenzarían las preguntas sobre dónde había estado. La verdad es que eso también era parte de lo que me atemorizaba del encuentro con Jess, ella no tardaría en preguntarme qué me había pasado y no aceptaría evasivas como respuesta. La verdad es que estaba teniendo suerte con Tina, ya que gracias al tema de Jess, no me había preguntado nada sobre mi. Inconcientemente, con la mano que tenía libre me toqué el pecho y sentí, a través de la camisa, aquellas marcas de mi demasiado cercano encuentro con la muerte.

- ¿No podrías tú hablar con ella primero? Decirle que estoy aquí, que estoy bien... que quiero verla y hablar. Por más que me encantaría sorprenderla con mi aparición, tal vez no sea lo mejor si está tan sensible como dices... ¿Crees que puedas hacer eso por mi?

Apreté un poco más su mano, amistosamente, mirándola fijo y sonriendo muy levemente. Me quedé un momento mirando sus ojos, cuando me di cuenta que me había perdido en aquella mirada y sacudí la cabeza reaccionando y volviendo en mi rápidamente. Sin darme cuenta, solté su mano y volví a tomar la taza. De repente muchos recuerdos se agolparon en mi cabeza, viejos sentimientos olvidados volvieron pero traté de reprimirlos. Bajé la vista y volví a levantarla hacia ella, que por su mirada parecía haber notado que algo me pasaba.

- Lo siento, es... este colegio, me trae recuerdos... estoy como volviendo al pasado demasiado bruscamente. Creo que me costará acostumbrarme a la idea de que... estoy aquí de nuevo.

Bridget Lebon
[con Jason]


Estaba algo asustada...por una parte porque no lo tenia todo controlado, y por otra porque lo estaba pasando bien con Jason, eso era como...algo que no tenia sentido pero aun asi me sentia a gusto con Jason, incluso podría ver en el un aliado este curso...no habia hecho muchos amigos ni amigas asi que vendría bien el poder confiar en alguien...debería conocerlo mas pero por ahora la impresión era muy buena.

-Lo siento a veces me paso hablando...pero en mi carrera eso es una buena cualidad...

- También es una buena cualidad cuando estás hablando con Jason Moore... y estás quedando muy bien, por si te interesa saber cómo va el marcador.

Medio sonreí, en cualquier otra boca eso habría sonado totalmente arrogante...pero ahora mismo ya no importaba que lo fuera porque por otra parte habia conocido al Jason Moore amable. Brindé...

Vaya...todo un honor...-dije sarcásticamente pero sonriendo.

- La verdad es que admito que no esperaba que tuvieras un pensamiento tan... crítico, pero a la vez coherente y... bastante decente incluso, tienes una manera de pensar que comparto en muchos aspectos y... me parece genial que seas capaz de ver tu entorno de esa manera. Tal vez es una mirada un poco oscura, si me preguntas... La diferencia conmigo es que yo veo todo eso y lo miro con optimismo.

Optimismo de la diferencia de clases que se hace en este colegio?...-dije alzando una ceja...-vaya...-yo no veia nada de eso con optimismo...me parecia simplemente...patetico.

- No, no es optimismo es... Oportunismo, tal vez. Suena mal, pero para sobrevivir hay que evolucionar o morir, y algunos interpretan mal la evolución, intentando avanzar por el impulso de otros cambiando para adaptarse a los requisitos de cierto grupo social... tal como tú los describes.

Asentí con la cabeza...entendía perfectamente lo que decía...habia oido a muchas chicas que se querian teñir el pelo como Angie para estar en su grupo...eran unas payasas...

Otros, como yo, aprovechamos las mejores características de esas otras personas para usar lo que nos sirva... Y tranquila, que no todos salen mal parados ni se terminan sintiendo usados, al contrario. Por ejemplo, nuestro amigo... ¿Cómo se llamaba? ¿Millhouse? En fin, no creo que se vaya a sentir usado ni manipulado, al menos no si cumplo mi palabra, créeme.

Reí...si o como Angie al haberle ofrecido la cocaína, ella era rica, podia pagar incluso si subí el precio un poquito....

- Otros puede que sí, pero así es la vida... la supervivencia del más fuerte.

Y que le prometiste...? porque no creo que un jugo le sirva de pago....-dije curiosa...-le prometiste saludarle por los pasillos?...jajaj ellos te ven como un tio importante Jason...deberias hacerles un poco la pelota...-dije divertida...sabia que la idea de hacerle la pelota a un nerd no le agradaba a nadie.

- Bueno ¿Qué tienes ganas de hacer? Te doy pase libre para despedirte y seguir con tu vida si ya te cansaste de mi, y no quedar mal, o puedes improvisar algún plan que me incluya, estoy abierto a cualquier cosa que me ayude a despejarme un poco después de una noche en vela trabajando en mi laptop... lo que sea que me permita dejar de ver el mundo en un rectángulo de 17 pulgadas me viene bien.

Reí...-Bueno...curiosamente no me lo estoy pasando mal...-no iba a decirle...wow Jason me ha impresionado tu forma de ser, lo estoy pasando genial!...si los nerds le adulaban, para que iba a hacerlo yo?...- No se que podamos hacer a las 15:30 en este colegio...-dije pensativa....y por un momento pensé en el mejor plan para compartir con Jason...y no, no se trataba de pillar a Nerds y hacerles la vida imposible...-podriamos, nose...averiguar quien escribió eso...-dije como disculpandome por mi plan...- se que es un plan algo...triste...pero no se me ocurre que hacer, y por otra parte me urge limpiar mi etiqueta de EMBARAZADA DROGADICTA...-dije haciendo una mueca...-aunque si no te apetece tengo un plan alternativo...aunque quizás no este a tu nivel...-dije de nuevo bromeando....-es broma...-enseñé las palmas de mis manos en señal de son de paz...

-Pues hay aqui cerca un sitio para jugar al Paint Ball...nunca he ido, pero dicen que es divertido...que dices?...podriamos desestresarnos un poco disparandonos pintura no?...-me encogí de hombros...

Si te desestresa mas llevarte a "Milhouse" hazle una te tus promesas y le disparamos...-dije bromeando de nuevo...estaba pareciendo tonta o era solo sensación mia...es que con Jason parecia que siempre fueras a meter la pata...que pudiera contestarte a todo con algo mas inteligente de lo que tu eras y eso a la vez que me gustaba porque podias aprender mucho, imponia.

Le miré y miré un poco alrededor, mucha gente conocia a Jason Moore...muchas chicas lo miraban...pero a mi me daba la sensación de que a mi tambien me miraban y mal...era como estar con un famoso sentada tomando un jugo...o al menos esa sensación me daba, quizás estaba exagerando, pero por un momento no me sentía cómoda...siempre la gente me ve como "la solitaria del Saint Andrews" y sentarme con Jason me hace subir escalones muy deprisa...

De todos modos...esto se está llenando...salimos?...-dije ya cogiendo mi bandolera y mi chaqueta. De pronto pensé...si Jason manipulaba a los nerds...quizás intentaba hacer algo parecido conmigo...quizás a mi tambien me veia como una nerd...empecé a agobiarme un poco con esa idea...pero a la primera que viera algo raro...me largaba...*



* Tiene muchas paranoias...XD, es que las drogas son muy malas
Plan: Se que el plan es algo....rarito pero es que no me venia otra cosa a la cabeza...es algo asi pero tranqui, sin beso al final, solo para tirarse globos o con pistolas, como quieras^^

Aqui te dejo el video...

http://es.youtube.com/watch?v=3AIKVRNtJSM

T.K.
(Con Carla y Heather)

(Me causó un poco de gracia cuando Carla me habló en un principio, me gustó como en un principio Carla trató tranquilamente a esta chica, con serenidad, no como la otra había aparecido toda exaltada, eso me habló bastante bien de su caracter, pero bueno.. Heather era que se llamaba, ella continuó hablando, tenía razón, eran un tanto antiguos los adornos, tal vez era hora que el colegio se pusiera y comprara nuevos, pero eso definitivamente no dependía de nosotros, bueno tampoco mucho me interesaba, con tal de tener adornos, nuevos o viejos, estaba bien...)

Heather: Asi que Tk, estas en la universidad cursando ... 1ª? 2º? No te veo mucho mas mayor que nosotras.

Eemm no, estoy en Primero recien, este año pasé a la Universidad..

Heather: No veo el momento en el que me gradue y empiece a estudiar algo que realmente me guste ... Y asi dejar de agobiarme con los problemas del consejo estudiantil y todos esas cosas... ... Ojo, que me resulte pesado en ocasiones, no significa que no me guste. Asi que ya sabeis, si teneis algun problema solo buscarme.

Es bueno eso... miren, no les voy a mentir

(Les dije deteniendome por un momento en lo que estaba haciendo)

La universidad es genial, es todo muy distinto, es otro mundo, pero tambien es mucho más dificil de lo que pensaba algunas cosas, al principio, ahora ya me he acostumbrado, los estudios, tomar apuntes y todo eso, pero uno se acostumbra y luego es un poco más llevadero, aunque al principio en mi caso, la verdad que me costó bastante adaptarme, el estar en el último año del colegio, y todo, graduación y eso sinceramente la pasé genial pero... es otra cosa la universidad...

(Me reí levemente)

Mi hermano me decía cuanto añoraba el volver alguna vez al colegio nuevamente, y yo no entendía por que... ahora si entiendo.. pero en fin, gracias por el ofrecimiento.. si necesitan algo de material o algo, creo que tengo los apuntes del año pasado, se los puedo dejar a ustedes si desean... por lo otro, espero no tener ningun problema con el consejo... bueno eso espero de aquí a que pase algo, valla uno a saber

(Les dije sonriente, luego me entró un poco de curiosidad)

Y que es lo que tienen en mente estudiar una vez que lleguen a la Uni?

DUSTIN
(Con Barbie)

(Ella me comento que no sabía si era fanatica de las fiestas, pero que le gustaban, le gustaban, algo que me pareció bien, luego me comentó que le gustaba a pasear, y esas cosas de salir de shopping, típico en las mujeres...)

Barbie: Así que no eres de ir a las fiestas? ... ¿Qué haces vos para divertirte? ¿Leer comics?

Acaso tiene algo de malo eso?

(Le dije serio por un momento, pero luego me reí un poco mirandola)

Naah a veces leer comics cuando no tengo nada que hacer me quita del aburrimiento, antes leeía más historietas, ahora no tanto, y no es que no sea taan fanatico de las fiestas, de vez en cuando asisto, pero no es que haga fiesta todos los días, es según..

(Ella me preguntó ya estando dentro del edificio, donde era que averiguaba en que habitación era que le había tocado, por lo cual le señalé hacia un lado)

Por aquí.. sigueme...

(Creo que era por aquí, ya ni me acordaba, pero si, al caminar y leer un cartelito, me di cuenta que estaba en lo correcto)

Sip, aquí es...

ERIC
(Con Barbara)

(Esto estaba más caliente que el sol mismo, ella y yo, apunto de ser uno, noté al ver sis ojos como ella me deseaba a mi, tanto como yo la deseaba a ella... dios que hermosa se veía, si me hubieran preguntado al momento que la conocí, que iba a estar con ella en mi habitación en el campus, hubiera dicho que era muy poco probable, ahora si que creeía en las casualidades de la vida...
Sentí como sus piernas me rodeaban las caderas .. mientras que nosotros dos nos encontrabamos en ese profundo beso... lentamente comencé a entrar en ella, llenandome de placer, observando su rostro, y contemplando la expresión que ella en el mismo dibujaba, no pude evitar sonreírle en forma complise, mientras suavemente comenzaba a moverme dentro de ella, lento, había que disfrutar el momento, y más aún con ella... y pensar que en aquel momento pense que no la iba a ver más, y ahora esto... había que disfrutarlo al maximo, todo...
Bajé mi cabeza hasta la altura de sus pechos, jugueteando con mi lengua en sus pezones, los cuales ahora estaban bastante duritos...)

Quien diría que...

(Solté un poco el aire)

que nosotros... esto...

Tina(con Sebastian)

Como me esperaba, Sebastian ya había pensado en lo que yo había dicho antes de que se lo mencionara y ,por suerte, creía lo mismo que yo y no pensaba hacer daño a Jess. Era una suerte! Asi no tendría que partirle las piernas cuando Jess viniera llorando . (???)

- La verdad es que no sé qué hacer... No quiero aparecerme como lo hice contigo, no sé cómo pueda reaccionar ella, especialmente si piensa que yo estoy muerto.

Torcí la boca de medio lado y asentí , ahora era él quien agarraba mi mano. Su muerte "fingida" iba a ser un gran problema, sí. Jess había creido tanto tiempo que Sebastian no regresaría que más que una sorpresa podría parecerle una broma y de mal gusto. Sin mencionar el hecho de que Sebastian había obviado dar señales de vida en todo este tiempo y eso tendría que explicarlo. Quizás también debería decir donde había estado pero... No era yo la que debía preguntarle. Al menos a mi no me importaba por ahora, tenerle de vuelta era lo importante.

- Creo que tienes un problema y grande.

- ¿No podrías tú hablar con ella primero? Decirle que estoy aquí, que estoy bien... que quiero verla y hablar. Por más que me encantaría sorprenderla con mi aparición, tal vez no sea lo mejor si está tan sensible como dices... ¿Crees que puedas hacer eso por mi?

- Eh... Claro, ahora empaquetame a mi el problema - le dije bromeando pero cuando noté que apretaba mi mano supe que me lo decía en serio y que era necesario que yo hablase con Jess - esta bien, te doy mi palabra. Hablaré con ella.

No sabía como, ni cuando, ni como explicarlo pero... algo se me ocurriria.

Le sonreí al tiempo que el lo hacía y nos quedamos unos segundo asi, sin hablar hasta que él pareció sentirse incomo y separó su mano de la mia para agarrar la taza. Le miré de manera inquisitiva por un momento y después, como él lleve las manos a mi taza.

- ¿Estas bien? - pregunté por evitar ese silencio incomodo que de pronto nos había rodeado más que por otra cosa.

- Lo siento, es... este colegio, me trae recuerdos... estoy como volviendo al pasado demasiado bruscamente. Creo que me costará acostumbrarme a la idea de que... estoy aquí de nuevo.

- Es extraño - dije mirando a nuestro alrededor - cuando llegas a este colegio no sabes muy bien que haces aqui y después, cuando no estas entre sus paredes parece que lo echas en falta.

Sonrei y le di otro sorbo al café, después volví a mirar a Sebastian.

- De todas maneras tomatelo con calma, es duro regresar, sobre todo si los últimos recuerdos que tienes son los del atentado. A todos nos costó en su momento. - dije entrecerrando los ojos pensativa - Asi que, ahora, simplemente disfruta de mi compañia y de un buen café y deja tus deudas con el pasado para más adelante. Lo que te preocupa puede esperar.

Carla
(con Heather y TK)

Estupendo, la tal Heather era del consejo escolar, delegada de mi curso y sobrina del director. Ya podía olvidarme de pasarmelo bien en mi cuarto. ¿Como habia llegado ella a ser mi compañera? Todos estos meses intentando hacerme hueco en el mundo de las fiestas secretas y no tan secretas de Saint Patrick y ahora, con ella... Podía olvidarme de toda mi reputación. Me crucé de brazos algo desganada, mientras TK nos decía la verdad sobre la universidad, la vida en ella y sus fiestas pero para mi el día había pasado de ser blanco perla a ser blanco hoja de examen. La sobrina del director, esto no podía estar pasándome a mi. Si parecía mas dulce que una manzana caramelizada! Menudo agobio (*)

- Y que es lo que tienen en mente estudiar una vez que lleguen a la Uni?

- Pues ... - me quedé pensativa unos instantes mientras colocaba una bola en el arbol - Mi piace el periodismo pero credo que preferisco algo como medicina, veterinaria... - si, el latín no era lo mio - quizás biologia, mmm... no. Creo que veterinaria. Bueno, en realidad no lo tengo claro todavía aun me queda un gran año para pensarlo, no?

Me encogí de hombros y sonreí.

- De momento espero aprobar el examen de quimica de esta mañana porque me veo en los finales con esa maldita asignatura. Heather, tu que tal vas en eso?

Ok, era hora de sacar provecho. Si no se le daban bien siempre podía habla con su tio y que nos aprobaran a las dos, no? En que scuola no se facia eso?




Ginny
(con Ron, Haley y Yasey)

Como era de esperar Ron no tardo ni dos minutos en dejarme mal. Yo, ¿mal en mates? No iba mal en mal, debia esforzarme más para aprobar o para sacar un suficiente pero... solo eso. No era cuestión de ir mal.

En serio?....bueno si quieres yo puedo ayudarte, y Haley tambien...si tienes alguna duda nos puedes pedir ayuda vale?...

- Obviamente - le guiñe el ojo - Para eso estamos, para ayudar ^^


- No voy mal en matemáticas - protesté repitiendo mis pensamientos - solo que no voy tan bien como en otras asignaturas pero si soy tutoras no me vendría mal una ayudita. - vale, quizas si me costaran las mates.

Las miré sonriendo nerviosa. Guay, si me ayudaban con mates puede que consiguiera tener amigas.

Continuamos hablando de estudios hasta lelgar a la cafetería-comedor del instituto para comer y después seguir con la visita.

- Guau, esto es enorme - comenté mirando hacia el techo - Has visto? El Cathedral me aprece ahora super pequeño. - minusculo sería mejor palabra- - Y aun sigue con gente? - instintivamente miré el reloj, eran casi las cuatro. ¿ Que hacia la gente aun aqui?

- Como ven, esta casi repleta... siempre es así. Tal vez en horarios de clase habra menos gente pero generalmente esta llena.

- Vaya... - le di un codazo a Ron del estilo "flipa" y seguimos a las chicas para sentarnos en la mesa libre.

Haley nos comentó que en este instituo la gente te encasillaba por quien te sentabas asi que ahora que estabamos con ellas oficialmente perteneciamos a su grupo. Miré alrededor, los deportistas estaban tres mesas en diagonal, las niñas ricas tres a la izquierda... Era oficial, este año seríamos parte de los corrientes tirando a nerds. Bueno, no era un e´xito pero tampoco un fracaso, ademas Yasie me caía bien y Haley parecía muy amable.

- Ahm.. me olvidaba ya . Yo ire por los pedidos... aunque unas dos manos más no me vendrian mal de ayuda ¿Que van a pedir?.

- Yo me dejo aconsejar por vosotras- dije al mismo tiempo que me levantaba - asi que yo tambien ire a por la comida, de acuerdo? Has ganado 5 estrellas de la amistad por ofrecerte pero... sería de mala irlandesa no ayudar. -sonreí - Lo de Ron es defecto de fábrica - bromeé. Después le saqué la lengua.

Yasie y Ron eligieron su comida y depués Haley y yo nos acercamos a la barra.

- Bueno, y que tal se vive aqui? - pregunté interesada. Me había empeñado, incluso había discutido con mi madre, en vivir aqui aunque era un gasto mucho mas grande... y ahora quería asegurarme de que no me había equivocado.

SON LAS 4:30 DE LA TARDE

Cassidy Makenzie (Con Nancy)



- No, ...creo que mejor no..no me gustaria ni pensar que puedan decir o no decirme de mi hermano. A proposito, soy Cassidy. Y debo decir, que no esta mal conocer a alguien que no conoce a mi hermano.
Nancy - Nancy Audoux, para servirla a usted y a...mí
Solté una pequeña carcajada bromeando, la verdad es que no podía se desagradable con todo el mundo, después de todo tenía que hacer una nueva vida, con cambios. Puse mi mano en el mentón y me quedé pensativa
Nancy - O sea...que por lo que me estás diciendo...y por lo que supongo yo...tu hermano es uno de los sex bomb del Saint o qué?

- No creo que sex-bomb fuera la palabra de que yo utilizaria pero asi es, es...bastante conocido.
La miré levantando las cejas
Nancy - ¿Y cómo es que no lo conozco aún, eh?
Le guiñé un ojo y sonreí, estaba bromeando obviamente por lo que me dijo que se alegraba de conocer a alguien que no conocía a su hermano

- Bueno, es que estudie exactamente aqui, se graduo de aqui y ahora esta en el St Andrew's. Pero eso es otra historia y seguro que no anda lejos. Y dime Nacy donde estudiaba antes de parar aqui?

Taylor Makenzie (Con Michelle y Dean)


- Yo no...nos vendra bien inmunizarnos ante lo que se nos viene encima esta noche, llena de discursos y presentaciones.

- Vaya, les dije que podían llamarme Dean y veo que desencadené una confianza veloz que no esperaba recibir, pero... - hice una pausa sonriendo - me gusta eso.
- Me agrada saber que no te incomoda.
- ¿Saben? Se supone que como su preceptor, debería controlar que ustedes tuvieran una actitud acorde a los principios de la institución... Comprar muérdago para las decoraciones navideñas es una cosa... tomar unas cervezas para que la voz del director Steward presentando los nuevos alumnos esta noche suene ahogada por su inmunidad alcoholizada... no tanto.

- oh, vamos no hablaras en serio? Ver su cara al vernos esta noche no tendria precio.
- Pero claro... ¿Qué gracia tendría salir con dos chicas tan atractivas con ustedes solo por una tontería de muérdago y negarse a las cervezas? Qué poco me conocen si por un momento pensaron que yo podría haberme opuesto a esa genial idea. Me gusta como piensas, Michelle.
Le guiñé un ojo mientras les abría la puerta del acompañante y las dejaba decidir quién de ellas iría delante conmigo, antes de dar la vuelta y sentarme al volante.
- Eso sí - llevé mi dedo índice delante de mi boca -, no vayan a decir nada de esto ¿Eh? Todavía estoy escudando mi propio libertinaje gracias al concepto puritano que tienen de mi, cortesía del trabajo del antiguo preceptor.

- Desde luego que no diremos nada, seremos una tumba...despues de todo, eres quien nos sacara de aqui.
- En eso tiene razón, tu no dices nada y nosotras tampoco, ese es el trato. Tu seguirás disfrutando de tu libertinaje y nosotras... bueno, nadie se enterará de nuestra salida sin permiso. - giré mi cuerpo poniendome el cinturón y acomodándome bien en mi sitio - Bueno, Rockefeller nos espera. - les miré - para el campus el mejor muerdago, no? - como se notaba que no iba a ser yo la que sacaría la tarjeta de crédito al final.
- Ni yo misma lo hubiera dicho mejor.
Y nos pusimos en marcha sin tardar demasiado en llegar. Nos adentrabamos entre las calles, esramso testigos de aquel bullicio de gente, que entraba y salia sin para con un monton de bolsas en sus manos.
- Ya puedo sentir el cosquilleo de las compras.- me rei.
- Uhhh... ha llegado la navidad! - comenté mirando a la gente que cruzaba por delante del coche cargada de bolsas de Barneys y Tiffany's - y parece que papa noel está generoso. - comenté resignada mientras buscaba un sitio donde dejar el coche. - Mira, ahí delante, hay un sitio. - señale unos metros delante nuestra en línea recta - Eso si que es tener suerte.
- Denme un momento ¿Sí? Aquí el estacionamiento es medido y tengo que meter las monedas en el parquímetro a menos que quieran ver esta belleza remolcada en navidad.
Dije acariciando suavemente la superficie de mi impala descapotable. Después de meter las monedas fui detrás de las chicas, poniendome en medio de ellas y pasando un brazo por detrás de la cintura de cada una.

Si, suerte... empezaba a creer que me iban a matar por traerlos hasta aqui sin pensar que en Navidades venir al rockefeller era una locura. Sobre todo el dia que encendían el arbol de navidad.
- Venga - dije una vez fuera del coche - Tengo ganas de empezar a usar el muerdago. - bromeé.
- Y te aseguro que no seras la unica de todo el colegio- me rei.
- ¿Se dan cuenta de que aquí afuera solo son dos chicas atractivas divirtiéndose con un chicho no mucho mayor que ellas, cierto? Aquí en esta jungla de cemento los roles de profesor y estudiantes no valen de nada... a menos que los consideren algún tipo de fantasía, y no estoy en contra de eso de ninguna manera.

- En cuanto a eso, te lo hare saber si se me ocurre alguna, sin duda.
- Pero bueno, primero lo primero... Ya que tú nos trajiste aquí, Michelle, guíanos hacia el muérdago así podemos largarnos en busca de esas cervezas, ya estoy empezando a... desearlas... a las cervezas, digo.
Mantuve mi sonrisa mientras seguía caminando guiado por ellas, aunque realmente quería terminar rápido el asunto del muérdago.

- Que pena que sea a las cervezas - bromeé siguiendole el juego con una sonrisa de medio lado - estaba dispuesta a llevar a cabo la fantasia de profesor y estudiante... bueno, otra vez será - rei.

- Bueno, el Rockefeller no debe andar muy lejos de aqui, no Michelle?
- Es mono, verdad? - le susurré al oido mirando a Dean, quería que supiera que hablaba de él - Una pena que Jason sea su hermano. - me mordí el labio y después mire al frente para dar un saltito y girar hacia la izquiera, justo para llegar a la tienda de decoración navideña mas importante y grande de Nueva York.

- Pues la verdad...-dije repasandole con la mirada descaradamente.-..es que es mi tipo.
- Creo que lo mejor será separarnos - les dije - Esto es demasiado grande y si vamos juntos tardaremos demasiado. ¿Nos encontramos aqui en 10 minutos ?- Miré hacia los lados y de nuevo a ellos dos - yo voy por este pasillo - dije señalando el de mis espaldas.

- Yo ire por este.- dije señalando el de la ropa de temporada.- Y prometo no entretenerme de camino.

Will (con Summer)

Ella pareció algo extrañada por algo que dije, pero no por mucho, al pensar en la pregunta que le había hecho, puso cara de niña inocente, como si fuera a decir algo malo, y me imaginé lo que venía a continuación.

- ¿En qué? Pues...a lo mejor...me tienes que ayudar en...algunas asignaturas... Osea que...quien dice alguna asignatura...dice...todas las asignaturas

Levanté las cejas un instante y suspiré.

- ¿Todas... las materias?

Ella comenzó a excusarse.

- Ya se que tienes tus cosas, tienes que sacarte tu curso y que ciencias es más dificil que letras pero...necesito que me ayudes...necesito en realidad que me enseñes a...estudiar, trabajar con resúmenes, esquemas, las redacciones,... La verdad es que necesito mucha ayuda. necesito centrarme y terminar 3º, quiero ser una chica universitaria, ¿sabes? También tengo sueños, como todos...

Esto sonaba a que iba a ser todo un desafío...

- Entonces...a partir de...hoy...eres mi...tutor?

Tragué saliva al escuchar aquello, me costaba hacerme la idea de eso, pero... bueno, en fin, ¿Qué podía perder? Sonreí como pude y extendí mi mano hacia ella como si cerrara un trato.

- De acuerdo. De todas maneras, será una buena manera de meter, entre asignatura y asignatura, un poco de clases de respeto al prójimo y a ver si puedo borrarte esa idea de catalogar a algunos como nerds o lo que sea.

Sonreí más ampliamente.

- Es broma. Aunque de verdad deberías considerar ser más comprensiva. Bueno, esta noche es la presentación de los nuevos alumnos, pero creo que terminará bastante más temprano que la hora de la cena, así que podríamos juntarnos después del acto para comenzar a ver qué es lo que necesitas mejorar... Eh... ¿Dónde...? ¿Dónde piensas que nos... juntemos...?

Era raro decir algo así a una chica como ella, especialmente yo, casi que sonaba a una cita, pero bueno, eran tonterías mías, ella sabía a qué me refería y no se me ocurría otra manera de expresar la pregunta. Si quería mi ayuda, más vale empezar pronto y no atrasarnos.


Dean (con Michelle y Taylor)

Subimos por las escaleras mecánicas con ellas murmurandose cosas al oído a mis espaldas. Luego, cuando tuvimos que internarnos en la multitud, Michelle sugirió que nos separaramos y rápidamente cada una eligió su camino. En diez minutos volveríamos a encontrarnos. Comencé a caminar por un pasillo pero sin perder de vista a Taylor. Podía haber apuntado a cualquiera de las dos en primer lugar, pero sabía que Michelle, con su caprichoso enamoramiento con mi hermano, me llevaría un poco más de trabajo, en cambio Taylor... había visto como me miraba en algunas ocasiones desde que salimos, y podía aprovechar esta temporal separación del trío para intentar algo más directo. Cuando ella se detuvo a mirar algo de ropa, me acerqué por detrás y pasé mis brazos alrededor de su cintura descaradamente, acercando mi cara a la suya desde atrás, asomando por enicma de su hombro.

- ¿No habías prometido no entretenerte en el camino?

Ella me miró de costado y yo sonreí, mientras con mis brazos la acercaba un poco más a mi, haciéndole sentir mi cuerpo contra el suyo.

- Creo que eres una chica muy mala, Taylor... Una traviesa y rebelde chica mala ¿O me equivoco?

Tomándola todavía de la cintura, la di vuelta para que quedara de frente a mi, pero aún mantuve mi desvergonzada cercanía, aprovechando la posición para acercar más mi cara a la suya, al punto de que mis labios quedaran a escasos centímetros de los suyos. Ya no podían quedarle dudas de mis intenciones, y de que el rol de preceptor estaba lejanamente olvidado aquí.

- Estoy seguro que Michelle encontrará rápidamente el muérdago... especialmente porque se fue caminando directo a un cartel enorme que decía "muérdago en oferta" - sonreí -. Así que... ¿Qué te parece si aprovechamos estos diez minutos antes de volver con ella para pasar... unos muy buenos... diez minutos... de diversión?

Mientras hablaba, me había seguido acercando a sus labios, y no me detendría a menos que ella me detuviera.
Jason(con Bridget)

Bridget sugirió que intentáramos averiguar quién había hecho la infame revista, pero luego pareció tener un momento de inspiración, y después de algunas vueltas me contó su idea.

-Pues hay aqui cerca un sitio para jugar al Paint Ball...nunca he ido, pero dicen que es divertido...que dices?...podriamos desestresarnos un poco disparandonos pintura no?...

La idea sonaba... original... casi demasiado. Y no me imaginaba a mi mismo disparando bolas de pintura con una chica, pero... ¿Qué diablos? Me había arriesgado a esto al dejarle a ella la posibilidad de decidir, así que tenía que hacerme cargo de las consecuencias.

- Si te desestresa mas llevarte a "Milhouse" hazle una te tus promesas y le disparamos...

No pude evitar reir con aquel comentario.

- Creo que eso iría un poco en contra de lo que te decía antes sobre mi filosofía de "oportunismo sin crueldad" ¿No crees?

Noté como ella miraba alrededor y notaba como algunos nos miraban, traté de interpretar sus expresiones como incomodidad u orgullo de ser admirada o hasta envidiada, y me pareció que era más bien lo segundo. Aunque ya había decidido dejar, al menos por un período de tiempo, de intentar leer su lenguaje corporal y expresiones. Había logrado que ella tuviera cierta confianza conmigo, y se estaba soltando, no quería estar analizándola constantemente, sería cansador.

- De todos modos...esto se está llenando...salimos?...

Sonreí y me puse de pie.

- Larguémonos de aquí, la idea no suena mal... ¿Qué te parece esto? Vamos a ejecutar tu plan desestresante con bolas de pintura, y luego ejecutamos el mío para encontrar a nuestro enemigo anónimo...

Levanté la revista con una mano antes de doblarla y meterla en un bolsillo de mi abrigo.

- Creo que ya tengo una idea de cómo comenzar la... investigación. ¿Nos vamos?

Noté a algunas personas hablando entre sí y murmurando cosas al vernos salir juntos. La verdad es que ella estaba en lo cierto en muchas cosas, y tal vez aunque yo no le creía al principio, ella sí tuviera la mala fama que decía tener. Me parecía una injusticia, pero si a la vez, yo tenía la fama que ella decía, entonces ya estaba haciendo mi parte en ayudarla a no ser tan... despreciaba. A veces yo olvidaba el poder que tenía con solo mi presencia, mucho de eso fuera de mi control, pero otro bastante totalmente conciente.
Dejando el tema de lado intenté no pensar demasiado y salimos del colegio conversando tranquilamente, caminando en dirección a aquel lugar. Según ella no era lejos, así que no haría falta ir en automóvil, además, por más que usaramos ropa protectora y nos limpiáramos, siempre podían quedar restos de pintura en el cabello o algo, y no pensaba arriesgar el tapizado de mi BMW a una mancha de ese estilo.
Sebastian (con Tina)

- Es extraño, cuando llegas a este colegio no sabes muy bien que haces aqui y después, cuando no estas entre sus paredes parece que lo echas en falta.

Sonreí sin mirarla. Tenía mucha razón, cuántas veces había tenido yo el mismo pensamiento. Levanté mi vista hacia ella y me encontré con su mirada también.

- De todas maneras tomatelo con calma, es duro regresar, sobre todo si los últimos recuerdos que tienes son los del atentado. A todos nos costó en su momento. Asi que, ahora, simplemente disfruta de mi compañia y de un buen café y deja tus deudas con el pasado para más adelante. Lo que te preocupa puede esperar.


Sonreí indicándole que estaba bien y asentí con la cabeza.

- No te preocupes, no se me hará difícil, especialmente la parte de disfrutar de tu compañía. Después de todo, debe ser imposible no hacerlo.

Le guiñé un ojo y le di un trago más al café. Me tranquilizaban sus palabras porque sabía que sería una contradicción para ella misma que me preguntara por mi pasado oculto ahora.

- ¿Así que John Steward es lo mejor que le pasó a este colegio? ¿Qué tal es estar bajo su dirección? ¿No se extraña ni un poco a Audoux?

Me mantuve serio un momento y luego reí. Audoux era un tipo demasiado rígido y serio, cosa que se transmitía en su manera de llevar adelante el colegio, como para ser del todo aceptado por un espíritu libre como el de Tina.

- No, supongo que no... Bueno, rubia, creo que ha llegado tu turno de confesar...

La señalé con un dedo sonriendo.

- ¿De qué se trata ese romance con el profe de arte? No es que sea una de tus compañeras de trabajo curiosas, pero tengo mi interés en tu vida amorosa también... así que venga, empieza a soltar todos los detalles, quiero saber. Y cuando lo conozca te daré mi diagnóstico sobre si es merecedor de una joyita como tú. Va a tener que pasar mi prueba... no quiero tener que matarlo si te lastima.

Ok, eso había sido una broma de mal gusto, o lo habría sido si la escuchara alguien que conociera mis secretos más oscuros, pero Tina solo lo tomaría como una broma, así que podía darme el lujo de bromear con eso. Tal vez estaba mostrando demasiado interés en su vida amorosa, y de una manera descarada, pero no me preocupaba, ella creía que mi corazón pertenecía a Jess y nadie más, y nosotros eramos solo amigos y compañeros, solo eso.

Apreté mis piernas fuertemente cuando él entro en mí, rodeando sus caderas con éstas, mis brazos se posicionaban de tan manera que podría abrazarlo y acariciar su espalda a la vez además.
Me mordí el labio inferior cuando comenzó a moverse lentamente, era este el momento preciso, donde nuestros cuerpos se unian en uno y nuestras mentes también, sólo queríamos darnos placer el uno al otro sin pensar en el después, sólo en ahora y lo bien que estabamos así.
Posé unos segundos mis ojos en sus ojos, sonriendole levemente. Arquié mi espalda cuando ya estaba aumentando la velocidad y cada vez me exitaba más, mis manos se aferraban de forma desesperada a su espalda y mis labios besaban su oreja de una forma sensual.

De un movimiento rápido y aprovechando mis piernas en sus caderas me di la vuelta para quedar yo encima de él, moviendome de forma circular sobre sus caderas e inclinandome un poco para besarlo.
Se veía tan lindo así, y yo me sentia satisfecha de poder dar y recibir más de lo que esperaba.



Qué día! Me estaban colapsando ya los famosos adornitos, por primera vez en toda mi vida que la navidad me parecia totalmente desesperante y más ahora que me encontraba a casi un metro y medio de altura sobre una escalera sujetada por un par de alumnos con "pánico a las alturas", baja grupito con el que me decidí trabajar. Aún así tenía que dar el ejemplo de colaboración para la ornamentación del establecimiento colgando guirnaldas navideñas y Santas por todos lados.
Cuando ya estaba sana y salva en el piso inventé alguna excusa para poder retirarme a algun otro lado y qué mejor que la tranquila sala de profesores, además que estaba algo atrasada con los últimos exámenes y quedaba tan poco para el fin del año escolar.
Ya libre de mis obligaciones con Santa Claus caminé a paso rápido hacia la sala para evitar alguna interrupcion que me obligara a volver con ellos, además que me merecía un pequeño descanso después de varias horas de trabajo intenso y extremo sobre escalas y tarimas para colgar adornos.
Una vez allá me senté para abrir mi carpeta con examentes, ojeandolos primeros, negando con mi cabeza y con una expresi´n de desaprovación al ver las hojas casi en blanco de alguno, bueno, no era mi culpa, había que ser exigente en los últimos meses. Me levanté para tomar algo de café de la máquina por que con la nieve se me estaba colando el frío en los huesos y vaya sorpresa cuando noté que no caía ninguna gota. Resoplé indignada todo parecía venir mal hoy ¿faltaba algo más?
Sin más me salí decidida hacia la cafetería a pedir un café a Martha y seguir con mis obligaciones intentado en el camino de no encontrarme con ningun alumno problemático por que el frío y el exceso de movimiento dentro del edificio habían terminado por ponerme de mal genio.
Entré a la cafetería directo donde Martha y esperé hasta tener el café en mis manos. Le di un sorbo antes de volverme a la sala de profesores y dando unos pasos hacia la salida me detuve de golpe, Tina! Que agradable verla, ella sí se había librado de las obligaciones navideñas y parecía muy divertida hablando con alguien, me acerqué para saludarla.

Ey Tina!

dije saludandola con la mano, no me parecía ningún profesor el tipo que me daba la espalda y que estaba con ella hablando, y no parecía ser Alfie, al menos que de un dia para otro cambiara totalmente. Cuando ya estaba casi al lado le di un gran beso en la mejilla

Donde has estado? Me has tenido sola con los chicos por lo... de........

mi mirada se clavaba en quien la acompañaba, pero no podía ser!! Él estaba.... muerto??

No pude gesticular palabra y mis ojos no se despegaban de los de él, seguramente el delirio navideño me estab afectando por que me parecía ver a Sebastian pero eso era imposible, realmente imposible.
En un segundo quedé en blanco, mirando a Tina fijamente, diciendole con la mirada un ¿¡Como pudiste!? Como pudo ocultarme algo así, era mi amiga, mi mejor amiga y aún viendome sufrir por él nada me dijo sobre quevivia y estaba acá, tan cerca y yo creyendolo tan lejos, tanto que no me ilucionaba ya con la idea de volverlo a ver.
En un impulso me retiré de la cafetería, sin saber como ya estaba fuera del edificio caminando sin rumbo aún con la taza de café en mis manos, caminando perdida, sin escuchar nada mas que la voz que hablaba en mi cabeza que me repetía en todo momento "Esto no puede ser".

Cassidy Makenzie (Con Nancy)



- No, ...creo que mejor no..no me gustaria ni pensar que puedan decir o no decirme de mi hermano. A proposito, soy Cassidy. Y debo decir, que no esta mal conocer a alguien que no conoce a mi hermano.
Nancy - Nancy Audoux, para servirla a usted y a...mí
Solté una pequeña carcajada bromeando, la verdad es que no podía se desagradable con todo el mundo, después de todo tenía que hacer una nueva vida, con cambios. Puse mi mano en el mentón y me quedé pensativa
Nancy - O sea...que por lo que me estás diciendo...y por lo que supongo yo...tu hermano es uno de los sex bomb del Saint o qué?

- No creo que sex-bomb fuera la palabra de que yo utilizaria pero asi es, es...bastante conocido.
La miré levantando las cejas
Nancy - ¿Y cómo es que no lo conozco aún, eh?
Le guiñé un ojo y sonreí, estaba bromeando obviamente por lo que me dijo que se alegraba de conocer a alguien que no conocía a su hermano

- Bueno, es que estudie exactamente aqui, se graduo de aqui y ahora esta en el St Andrew's. Pero eso es otra historia y seguro que no anda lejos. Y dime Nacy donde estudiaba antes de parar aqui?

Taylor Makenzie (Con Dean)






- Bueno, el Rockefeller no debe andar muy lejos de aqui, no Michelle?
- Es mono, verdad? - le susurré al oido mirando a Dean, quería que supiera que hablaba de él - Una pena que Jason sea su hermano. - me mordí el labio y después mire al frente para dar un saltito y girar hacia la izquiera, justo para llegar a la tienda de decoración navideña mas importante y grande de Nueva York.

- Pues la verdad...-dije repasandole con la mirada descaradamente.-..es que es mi tipo.
- Creo que lo mejor será separarnos - les dije - Esto es demasiado grande y si vamos juntos tardaremos demasiado. ¿Nos encontramos aqui en 10 minutos ?- Miré hacia los lados y de nuevo a ellos dos - yo voy por este pasillo - dije señalando el de mis espaldas.

- Yo ire por este.- dije señalando el de la ropa de temporada.- Y prometo no entretenerme de camino.
Cada uno se fue por su camino y yo me dirigi al mio decidida cuando me detuve en uno de los escaparates sin remedio.
De pronto senti que alguien me agarraba por la cintura y se apoyaba en mi hombro.
- ¿No habías prometido no entretenerte en el camino?
- Como si realmente pudiese evitarlo. Supongo que es superior a mis fuerzas, sobre todo en estas fechas.
- Creo que eres una chica muy mala, Taylor... Una traviesa y rebelde chica mala ¿O me equivoco?
- Supongo que no, y en este caso, no iba a ser menos- respondi mientras se acercaba a mi.

- Estoy seguro que Michelle encontrará rápidamente el muérdago... especialmente porque se fue caminando directo a un cartel enorme que decía "muérdago en oferta" - sonreí -. Así que... ¿Qué te parece si aprovechamos estos diez minutos antes de volver con ella para pasar... unos muy buenos... diez minutos... de diversión?

Le cogi por la nuca y le bese con furia para apartarme poco despues.
- Me parece una idea perfecta- le sonrei lascivamente. Luego mire a los probadores de la tienda.
- Y se del lugar perfecto para hacerlo.- dije mientras entraba.- Vienes?

Sebastian (con Tina; después con Jessica)

Apenas había terminado de preguntarle a Tina sobre su romance con el profesor de arte, y recién comenzaba a contemplar la manera en que se sonrojaba al tocar el tema, cuando escuché una voz a mis espaldas que me dejó helado.

- Ey Tina!

Estaba a punto de darme vuelta cuando me di cuenta que tal vez no fuera bueno. Si me movía lo suficientemente rápido y bien, tal vez podría escapar sin que me viera bien, ya que no parecía haberme reconocido de espaldas. Mi instinto de asesino profesional y sigiloso me llevaba a pensar la mejor vía de escape, pero recordé que esto no era una misión, esto era simplemente un encuentro, y algo que debía enfrentar tarde o temprano, así que tal vez fuera mejor ahora.

- Donde has estado? Me has tenido sola con los chicos por lo... de........

Entonces me vio. Inmediatamente se quedó paralizada y empalideció un poco. Yo abrí la boca para decir algo pero las palabras no salieron. Tan rápido como nuestras miradas se habían encontrado, volvieron a perderse, y ella miró a Tina fijamente durante un instante, antes de pegar la vuelta y marcharse caminando firme y rápidamente hacia la salida.

- J-Jess... Diablos - murmuré -. ¡Jessica!

Me puse de pie para ir detrás de ella pero entonces me detuve y me di vuelta.

- Lo... lo siento, Tina, tengo que... ir...

Ella asintió, comprendiendo, y yo dándome vuelta, comencé a correr detrás de Jessica. Crucé las puertas de la cafetería deteniéndome bruscamente en el pasillo y mirando a ambos lados. Vi a Jessica caminando a paso rápido justo a tiempo antes que cruzara la puerta de salida del edificio y desapareciera por un camino que lo rodeaba. Me lancé detrás de ella gritando su nombre, pero no se detenía, así que cuando la alcancé, me paré delante de ella tomándola por los brazos. Ella no se atrevía a mirarme a la cara, y apenas la detuve, la taza de café que llevaba cayó al suelo, volcándose todo su contenido bajo nuestros zapatos.

- Jessica... mírame. ¡Mírame!

Llevé una mano a su mentón, levantándolo suavemente hasta que me miró.

- Soy yo. Soy yo, Sebastian. No te escapes de mi ahora que estoy aquí... Vi cómo miraste a Tina, no la culpes, ella no sabía nada de mi hasta hace unos minutos cuando me la encontré.

Bajé la vista un momento pero luego la miré otra vez.

- Lamento no haber ido directamente a buscarte, pero temía tu reacción, teniendo en cuenta que... bueno, se rumoreaba que yo estaba muerto...

Sonreí de lado. La verdad es que tenía su gracia que no supieran si estaba vivo solo porque desaparecí, cuando ni siquiera sabían lo que había acontecido en el Central Park aquella noche.

- Por Dios... estás tan hermosa como te recordaba, o aún más... No tienes idea de cuánto deseaba verte, Jess... No ha pasado un día ni una noche desde nuestro último encuentro que no haya pensado en ti, cariño.

Su silencio me estaba matando, quería saber qué sentía, quería que me dijera algo, lo que sea.

- Jess... por favor... dime algo.

Dean(con Taylor)

Apenas un poco de provocación directa y Taylor me siguió el juego como si lo hubiera estado esperando. No esperó que me acercara más a sus labios, me tomó por la nuca y me besó con una pasión y una furia que debía admitir que me tomaron un poco por sorpesa.

- Me parece una idea perfecta- Y se del lugar perfecto para hacerlo.

Vi que miraba hacia los probadores de la tienda. Sonreí de manera pícara al entender su idea. Ella simplemente comenzó a caminar hacia allí.

- Vienes?

Mantuve mi sonrisa mientras me acercaba un poco. Esperé que nadie me viera, cosa que costó un poco por la cantidad de gente que había allí, pero cuando me pareció que nadie me miraba directamente, me metí en el probador que había entrado Taylor. Apenas entré y quedamos a solas, la tomé por la cintura acercandola a mi, y pegando mi cuerpo al suyo, comencé a besarla con furia, como ella había hecho antes, sin necesidad ya de sutilezas ni de disimulo, haciendo de nuestras bocas una mientras mis manos acariciaban sus caderas, su espalda.

- Vaya... perdón por ser tan directo pero... tienes un culo encantador.

Le dije sin separarme demasiado de su boca y sonriendo, mientras lo aferraba con ambas manos y aprovechando la pose pegaba su cuerpo al mío un poco más, haciendole además sentir mi cada vez más notable erección. Teníamos diez minutos ¿Para qué andar con más rodeos? Con una mano comencé a acariciar su cuerpo hacia arriba, por debajo de su camiseta, y sin dejar de besarla, comencé a acariciar y masajear sus pechos, sin despegar mi cintura de la suya.

Cassidy Makenzie (Con Nancy)



- No, ...creo que mejor no..no me gustaria ni pensar que puedan decir o no decirme de mi hermano. A proposito, soy Cassidy. Y debo decir, que no esta mal conocer a alguien que no conoce a mi hermano.
Nancy - Nancy Audoux, para servirla a usted y a...mí
Solté una pequeña carcajada bromeando, la verdad es que no podía se desagradable con todo el mundo, después de todo tenía que hacer una nueva vida, con cambios. Puse mi mano en el mentón y me quedé pensativa
Nancy - O sea...que por lo que me estás diciendo...y por lo que supongo yo...tu hermano es uno de los sex bomb del Saint o qué?

- No creo que sex-bomb fuera la palabra de que yo utilizaria pero asi es, es...bastante conocido.
La miré levantando las cejas
Nancy - ¿Y cómo es que no lo conozco aún, eh?
Le guiñé un ojo y sonreí, estaba bromeando obviamente por lo que me dijo que se alegraba de conocer a alguien que no conocía a su hermano

- Bueno, es que estudie exactamente aqui, se graduo de aqui y ahora esta en el St Andrew's. Pero eso es otra historia y seguro que no anda lejos. Y dime Nacy donde estudiaba antes de parar aqui?

Taylor Makenzie (Con Dean)




- Yo ire por este.- dije señalando el de la ropa de temporada.- Y prometo no entretenerme de camino.
Cada uno se fue por su camino y yo me dirigi al mio decidida cuando me detuve en uno de los escaparates sin remedio.
De pronto senti que alguien me agarraba por la cintura y se apoyaba en mi hombro.
- ¿No habías prometido no entretenerte en el camino?
- Como si realmente pudiese evitarlo. Supongo que es superior a mis fuerzas, sobre todo en estas fechas.
- Creo que eres una chica muy mala, Taylor... Una traviesa y rebelde chica mala ¿O me equivoco?
- Supongo que no, y en este caso, no iba a ser menos- respondi mientras se acercaba a mi.

- Estoy seguro que Michelle encontrará rápidamente el muérdago... especialmente porque se fue caminando directo a un cartel enorme que decía "muérdago en oferta" - sonreí -. Así que... ¿Qué te parece si aprovechamos estos diez minutos antes de volver con ella para pasar... unos muy buenos... diez minutos... de diversión?

Le cogi por la nuca y le bese con furia para apartarme poco despues.
- Me parece una idea perfecta- le sonrei lascivamente. Luego mire a los probadores de la tienda.
- Y se del lugar perfecto para hacerlo.- dije mientras entraba.- Vienes?
Me adentre en uno de los probadores vacios y espere a que Dean entrara. Poco despues estabamos besandonos sin desenfreno mientras me sostenia por la cintura, mientras bajaba sus manos hasta mis caderas.
- Vaya... perdón por ser tan directo pero... tienes un culo encantador.
- Desde luego, con el tuyo no tengo en absoluto ninguna queja- gemi mientras sentia sus manos mi camiseta.
Le quite la suya con brusquedad y coloque mis piernas alrededor de su caderas, apretandome contra su ereccion mientras subia mis manos por su pecho hata llegar al cuello, despues de sentir como me quitaba la camisa con rapidez.

Jessica
(Con Sebastian)

Sus palabras sonaban vacías, me hablaba pero no lo oía, aún estaba mi mente volando por algún sitio desconocido y yo tiritaba, simplemente sus manos en mis hombros me aterraban ¿que era esto?
Cuando tomó mi menton dude unos segundos en fijar mis ojos en los de él, queria hablar pero no podía, tenía un nudo en la garganta y sabia que si lo miraba mis lagrima caerían sin poder evitarlo.

- Soy yo. Soy yo, Sebastian. No te escapes de mi ahora que estoy aquí... Vi cómo miraste a Tina, no la culpes, ella no sabía nada de mi hasta hace unos minutos cuando me la encontré.

Lo miré unos segundos, no, no iba a llorar más por él, ¿acaso no era suficiente? ¿acaso a él le importó un poco lo que sentia yo?

- Lamento no haber ido directamente a buscarte, pero temía tu reacción, teniendo en cuenta que... bueno, se rumoreaba que yo estaba muerto...

Suspiré levemente, aún no movía un músculo y mi mirada parecía perdida, en realidad lo estaba, no sabía en que pensar, todo esto era tan extraño

- Por Dios... estás tan hermosa como te recordaba, o aún más... No tienes idea de cuánto deseaba verte, Jess... No ha pasado un día ni una noche desde nuestro último encuentro que no haya pensado en ti, cariño.

Lo miré fijamente esta vez, sin temerle, con rabia, no era posible que pensara en mí después de desaparecer casi un año sin darme ninguna señal, no era posible que alguna vez haya sentido algo fuerte, ya no creía que lo nuestro hubiera sido tan real como yo lo sentí

- Jess... por favor... dime algo.

Aparté sus manos de mí, clavando una mirada dura sobre sus ojos. Una mezcla de odio, rabia, amor y felicidad estaba presente en mí.

Algo? Yo debo decir algo?

retrocedí un paso

No eras tú el que debió darme alguna señal antes? Decirme que estabas bien o por lo menos no torturarme con la idea de que estabas muerto

Miré al piso

Ya ni sé si te conmueve la idea de pensar en todo lo que sufrí por tu supuesta muerte. Creí que teniamos una complicidad única que te haría confiar en mí, pero veo que no es así, ya que se te olvidó el detalle de mensionarme que estabas vivo

mis palabras las lanzaba con rabia, las lágrimas caían desesperadas no sabía si de alegría por verlo y de impotencia al notar esta farsa

En fin, no te preocupaste por mí en todo un año, porfavor no lo hagas ahora.

me sequé rápidamente las lágrimas conteniendo las que venían

Y con respecto a Tina, no te preocupes, ya hablaremos ese no es tu asunto

Pasé por su lado para volver a entrar al edificio por el otro acceso y así poder llegar más rápido a mi habitación, no quería hacer algún tipo de escandalo con más gente mirando, no me haría gracia aparecer en la revista de los alumnos como un chisme más.
Me detuve mirandolo antes de seguir.

Aún te amo, pero no te entiendo

lo miré unos segundos y caminé hacia el edificio. Él tenía las explicaciones, yo no se las iba a pedir, él tendrá sus razones, inimaginables para mí, por las cuales había desaparecido así pero no era mi estilo presionar a nadie, a pesar de que sentir que merecía una muy buena explicación, pero mi mente no estaba en condiciones de exigir nada y a pesar de que sentia unas ganas incontrolables por abrazarlo y besarlo una vez más, me detuvo el asombro y la incertidumbre de no saber que quería, si aún me amaba o sólo saber el por qué de lo que pasó.

Anne
(Con Terry)

- Y hablando de nevadas..... ¿pasaras estas fechas aqui o te iras con tu familia?....


me quedé pensativa unos segundos

Aún no lo decido, aunque creo que me quedaré aquí y ellos vendrán o algo así, Dudo que vuelva a Inglaterra luego, además que mis padres casi nunca están

sonreí mientras llegaban con nuestros cafés

Tú de donde eres??

lo miré dandole un trago al café

No me has dicho tu edad ni ninguno de los datos escenciales dentro de una conversación de gente que recién se conoce

me reí aún mirandolo

Donde vas a quedarte tú para navidad? No sé por qué creo que te quedarás aquí con tus hermanos

Sebastian
(con Jessica; después con Tina de nuevo)

- Algo? Yo debo decir algo?

El tono de voz que usó, la manera en que me miraba a través de esos hermosos ojos empapados en lágrimas, y la manera en que se soltó de mi para alejarse un paso atrás, me indicaron sin lugar a dudas que esto no sería precisamente un reencuentro tierno y romántico.

- No eras tú el que debió darme alguna señal antes? Decirme que estabas bien o por lo menos no torturarme con la idea de que estabas muerto

- Jess... créeme, lo habría hecho si hubiera podido pero...

Pero ella no parecía escucharme, solo seguía descargando su ira conmigo, toda la rabia de los meses que no supo nada de mi.

- Ya ni sé si te conmueve la idea de pensar en todo lo que sufrí por tu supuesta muerte. Creí que teniamos una complicidad única que te haría confiar en mí, pero veo que no es así, ya que se te olvidó el detalle de mensionarme que estabas vivo

Bajé la vista un momento, preguntándome si en realidad no hubiera sido capaz de darle al menos una señal de que vivía, de que estaba bien... Pero en el fondo sabía que no era así, que aunque hubiera querido no podía decirle nada.

- En fin, no te preocupaste por mí en todo un año, porfavor no lo hagas ahora.

- No es así como son las cosas...

- Y con respecto a Tina, no te preocupes, ya hablaremos ese no es tu asunto

Aquello tenía el tono de ser su último comentario, y lo confirmó al pasar a mi lado sin mirarme y sin escuchar mis súplicas.

- Jess...

Ella se detuvo y se dio vuelta para soltar su último disparo.

- Aún te amo, pero no te entiendo

Créeme, cariño, yo tampoco soy capaz de entenderme a mi mismo. No dije nada mientras ella se alejaba y entraba al edificio, desapareciendo de mi vista. Me quedé un momento allí parado mirando hacia el último lugar donde la había visto, sin moverme durante no sé cuánto tiempo, y entonces di la vuelta y volví por donde había venido. No sabía bien a dónde ir ahora, qué hacer, solo quería estar solo y pensar, pero al pasar frente a la entrada de la cafetería me encontré con Tina que salía de allí. Parecía curiosa acerca de lo que hubiera pasado, pero lo suficientemente prudente como para no preguntar. Yo solo suspiré y me quedé en silencio un momento mirándola. Finalmente, hablé calmadamente y sin dejar de mirarla.

- Creo que deberías ir a hablar con Jess, no se lo ha tomado muy bien. Debe estar en su habitación...

Bajé la vista con la mirada perdida y solo suspiré una vez más.

- Yo iré a... bueno... no lo sé, solo... dale unos momentos si crees que necesita pensar, pero cuando puedas ve a hablar con ella ¿Sí? Eres su amiga...

Sin decir más miré una vez más a Tina a los ojos y por un momento sentí un enorme deseo de tomar mis cosas y marcharme de aquel lugar una vez más, sin dar explicaciones, sin decir nada, solo desaparecer... Pero dejando el pensamiento de lado, me di vuelta y caminé hacia afuera, alejándome de allí por el momento

Tina
(con Sebastian, luego en busca de Jessica)

Me levanté de mi mesa en la cafetería aun ligeramente sorprendida por lo que había pasado en menos de 20 minutos. No sabía como pero en un momento Jess había creido que la había traicionado una segunda vez y Sebastian se había reencontrado con el presente y Jess (menudo batacazo) antes de lo que cualquiera de los dos habríamos previsto. La cafetería del colegio... vale, no era el lugar más discreto si no queríamos que Jessica nos encontrara y poder preparar el terreno para Sebastian. Ese había sido fallo nuestro. Pero salir disparada hacia la puerta como alma que lleva el diablo, bueno, Jessica había exagerado las cosas para mi gusto pero tampoco podía decir a ciencia cierta que yo no hubiese reaccionado igual en su situación. Al menos esperaba que Sebastian la encontrase y arreglaran sus cosas.

Recogí los libros y me puse el fulard por el cuello. Después me acerqué hasta la puerta donde me encontré con Sebastian que venía de hablar con Jess. Le miré con cautela, deseosa de preguntar pero su cara no se veía radiante y feliz como para atreverme a decir algo. Simplemente hice una mueca con la cara como queriendole dar animos.


- Creo que deberías ir a hablar con Jess, no se lo ha tomado muy bien. Debe estar en su habitación...

Asentí con la cabeza un par de veces. Ahora le tocaba a la amiga intentar arreglar un poco la situación y se lo debía aunque Jess en estos momentos no quisiera ver la realidad.

- Yo iré a... bueno... no lo sé, solo... dale unos momentos si crees que necesita pensar, pero cuando puedas ve a hablar con ella ¿Sí? Eres su amiga...

Dejé escapar un suspiró y miré como Sebastian daba unos pasos y se alejaba unos metros. " Soy su amiga, pero también lo soy tuya Sebas...". Con paso acelerado caminé hacia él, para pomerme casi su lado justo cuando alcanzaba la salida del colegio, en el jardín.

- Sebas, espera! - cuando llegué a su altura apoyé mi mano en su hombro, con una sonrisa amigable - Se le pasara, te lo prometo. Solo han sido demasiadas experiencias en un solo día. Esta aturdida...

Me quedé mirándole a los ojos unos segundos y despues dejé que mi sonrisa volviera a salir dispuesta a bromear

- No a todas nos regresa un novio del inframundo, sabes? - bromeé, dándome cuenta que mi conversación con Alfie tendría que esperar... una vez más- En cuanto acabe de hablar con ella todo estara bien - me acerqué para darle un beso en la mejilla - te lo prometo - susurré aun junto a su oreja, después me separé de él y me alejé de nuevo a la entrada del colegio.

Ahora me tocaba ir a por Jess que miraría la realidad quisiera o no. Ella estaba enamorada de Sebastian y yo se lo haría ver aunque tuviera que obligarla a comprender. En cuanto llegué a la puert de su habitación deje la delicadeza de lado y simplemente golpeé su puerta con la palma de mi mano.

- Jess, abre la puerta. Sé que estás ahi.

Volví a golpear la puerta.

- Jess, abreme. Tenemos que hablar.

Michelle

(buscando a Dean y Taylor. Tiempo muerto! se acabaron los 10 minutos xD)


Definitivamente podía vivir en este mundo sin la ayuda de un GPS. Que manera de orientarse en una tienda, un pasillo de juguetes y justo detrás el muerdago... valé, había sido cuestión de potra mas que orientación pero ¿Qué mas daba? Ya habíamos terminado las compras y ahora tocaba la parte divertida. Las cervezas.

Casi a tirones con la gente, conseguí sacar de las estanterias las suficientes cajas de muerdago que necesitábamos y tras dejarlas en un carrito regresé a donde había quedado con Taylor y Dean empujándolo. Por mala suerte ellos aun debían de seguir buscándolo porque no estaban por ninguno de los pasillos cercanos. Rodé los ojos impaciente. Queria irme y queria irme ya! sin pensarlo demasiado saqué mi movil del bolsillo de la cazadora y le hice una perdida a Taylor para que supiera que ya estaba en el cruce donde habíamos quedado.
SON LAS 5:30 DE LA TARDE


Rogue Con John


Termine de vestirme mientras John hacia presente su gran incomodidad a la hora de hablar de lo que acababa de pasar. El continuaba intentando hacerme ver que todo estaba mal, que no debia repetirse, que si nos llegaban a descubrir podria perjudicarle... bla bla guau guau. Como se podia ser tan cerrado de mente? Yo ya no era ninguna niña y tenia que superar el hecho de mantener relacciones sexuales con otra persona sin necesidad de una union o esperar aceptacion social, y yo no pensaba ceder por que dijera "nunca mas"

Me abroche el boton del pantalon y me sente sobre el escritorio para calzarme las botas.



- Supongo que no hace falta decirte que esto tiene que quedar entre tú y yo... y absolutamente nadie más.

Asenti con la cabeza y cuando me volvi para mirarle, el se habia acercado a la puerta y miraba que no hubiera nadie esperando fuera algo que no me gusto en absoluto.
Me calce la otra bota y cerre mi cartera, la cual me colgue de un hombro mientras me acercaba a el.

- Comment? - No sabia por donde empezar y como si el no me escuchara continuo hablando. De mas, creo yo.

- No vuelva a buscarme a menos que sea por un asunto relacionado a la institución o tus estudios, señorita Danne.

Arrugue el ceño y ladee la cabeza llevandome una mano a la nuca - Ahora nos tratamos de usted?

- Mira John...- Dije serena - No se como sera tu vida privada, bien sûr creo que no he interferido ni tengo intencion de hacerlo... Tampoco se que me consideras ahora mismo, pero tengo que recordarte que somos dos personas adultas que no necesitan dar explicaciones de lo que hacen o dejan de hacer... Alors, que es lo que te preocupa?

Negue con la cabeza y me situe entre John y la puerta, cerrando esta a la vez para conseguir un poco de atencion por su parte.

- O acaso te has sentido obligado per moi en algun momento? Tan desagradable es, que me tienes que tirar de tu despacho como si fuera una desconocida? - Cerre los ojos unos segundos mientras suspiraba lentamente para mantener la calma en todo momento - No me pidas que no vuelva a buscarte, porque sabes que volvere y seguire volviendo hasta que deje de gustarte

Di un paso hacia delante y abri la puerta unos centimetros al mismo tiempo que pegaba mi cuerpo al suyo

- Bonne journee, monsieur Steward - le susurre con una pizca de ironia.

Me despegue de el y abri la puerta del todo. Y mientras salia de su despacho me anude la bufanda al cuello, pensando en el frio que haria fuera.

[[size=21]Encontrable a no se que John quiera tener la ultima palabra

Porfin estaba sola, como deseaba, necesitaba un respiro después de todo esto. Era demaciado en poco tiempo y aún no asimilaba una cosa con la otra, tal vez toda esta historia era más simple de lo que yo creía, pero la sorpresa y esa mezcla extraña de sentimientos me había impedido reaccionar de la forma calmada y totalmente diplomática de siempre.
Me senté al lado de la ventana, corriendo las cortinas para poder mirar el jardín e intentar acomodar de alguna forma los pensamientos y sentimientos para poder llegar a un acuerdo cómodo y fácil de comprender.


- Jess, abre la puerta. Sé que estás ahi.

Di un pequeño salto al escuchar el golpe en mi puerta. Dudé unos segundos en levantarme pero la insistencia de los golpes había me había distraído de todas formas,


- Jess, abreme. Tenemos que hablar.

Me acerqué a la puerta abriéndola

Pasa Tina

le sonreí dejandola entrar a mi habitación, discimulando al máximo todo, por el rostro de Tina la conversación no iba a ser de lo más tranquila, se la veía algo ofuscada, en fin, yo también lo estaba a si que se quería hablar de Sebastian esperaba que tuviera la delicadeza suficiente para entender que en este momento era un tema delicado

Sientate, dime, de que quieres hablar??

Dije sentandome al lado de ella, sobre la cama

Bueno, la verdad es que sé perfectamente por que viniste y sobre que quieres hablar y antes de que empieces sólo quiero decirte que contigo no estoy enfadada por que Sebastian ya me dijo que no sabías nada

le sonreí

A si que no sé qué más te interesa hablarme

Carla
(con Heather y TK)

Mientras decorabamos seguimos hablando de clases, profesores y asignaturas que se nos daban mal. Por suerte Heather parecia dispuesta a ayudarme con la quimica que me llevaba por el camino de la amargura. Despues de un rato, cuando se termino una de las cajas de decoración y el arbol por fin estaba terminao Heather tuvo la idea de ir a decorar las clases.

- Me convence la idea - sonrei - Total, no tenemos mucho que hacer hasta las ocho.

Heather se puso andar mientras que TK y yo la seguiamos de cerca. Cuando lelgamos al gimnasio entramos al almacen donde se guardaban todo este tipo de adornos desde la fiesta de la cosechas hasta la decoración del baile del año pasado.

- Escuchad, pillad una cada uno y asi no tenemos que hacer mas viajes

- Nessuno hace limpieza qui? - dije tirando un lazo que tenía encoma una capa de polvo de un centimetro - Porque é molto bonita, me gusta el color.

Tiré una vez más al tiempo que Heather advertía algo pero era demasiado tarde, la estantería, por el tiron se había venido contra mi y había hecho estallar la bombilla dejándonos a oscuras.


- Estais bien?

Acurrucada entre la estanteria volcada y otra, abrí los ojos despacio comprobando que tuviera todo en su sitio y bien colocado. Por suerte no había muerto aplastada. Poco a poco intente moverme y conseguí ponerme mas comoda, al menos ahora podía sentarme sobre las rodillas.

- Sí, sono bene.

Estuve un rato sin moverme, mientras Heather intentaba encender la luz y corroboraba lo que yo había pensado.

La bombilla estalló al golpearse la estantería contra ella - dije compunjida - Lo siento...

No lo sentia por ellos, lo sentia por mi. Odiaba los sitios a oscuras.

- Heather, TK... aqui no hai ratones, certo? - pregunté abrazándome a mi misma muerta de miedo. Ratones, cucarachas... Solo de pensarlo ya me picaba el cuerpo - Como vamos a salir de aqui? Odio la oscuridad, los ratones y ... creo que empiezo a tener claustrofobia.

Dean
(con Taylor)

Me encantaban las chicas con las que uno no necesitaba hacer todo sino que sabían tomar la iniciativa y moverse como correspondía, facilitando las cosas. Teniendo en cuenta el poco tiempo que teníamos, además, era toda una ventaja. Cuando ya nuestras camisetas estaban por el piso y ella prácticamente colgada de mi, seguí besando su cuello mientras mis manos recorrían sus piernas cada vez más arriba y por debajo de su falda hasta tomar su ropa interior y terminar bajándola de un tirón, mientras dejaba que ella se encargara de desabrochar mi pantalón. De repente se escuchó de algún punto entre nosotros una musiquita como de celular que se detuvo un momento después. Ignoré el sonido y apoyando a Taylor de espaldas contra el espejo del probador, acomodé sus piernas alrededor de mi y la penetré rápidamente, ahogando algún posible gemido de su parte con besos. Comencé a moverme dentro de ella, que seguía sostenida de mi y apoyada de espaldas en el espejo. Me movía bastante frenéticamente, sin hacer tiempo para disfrutarlo más o pensar en cambiar de posición, solo sexo duro, rápido y salvaje, sin pensar ni preguntar nada.


Sebastian
(con Tina)

Estaba alejándome de Tina y apenas había salido del colegio, cuando sentí pasos detrás mío y su voz de nuevo.

- Sebas, espera!

Tina me alcanzó y se puso a mi lado, con una mano en mi hombro y una sonrisa en su cara.

- Se le pasara, te lo prometo. Solo han sido demasiadas experiencias en un solo día. Esta aturdida...

Sonreí algo aliviado de tenerla a ella para ayudarme a mi también en este momento tan... raro.

- Lo sé...

- No a todas nos regresa un novio del inframundo, sabes?

Me reí ante la broma, pero instintivamente llevé mi mano nuevamente hacia mi pecho, acariciando por encima de la camisa aquellas cicatrices.

- En cuanto acabe de hablar con ella todo estara bien - Se acercó a darme un beso en la mejilla, y tuve que luchar contra los nervios que me provocaron esa cercanía imprevista - te lo prometo

- Gracias, Tina.

Fue lo único que se me ocurrió decir. Luego ella, con una sonrisa, se despidió y volvió a entrar, así que después de dar una mirada alrededor, continué mi caminata hacia el exterior.

TK
(Con Carla y Heather)

(La verdad fue que me tomó desprevenido por completo la caída de la estantería, y el ruido me sobresaltó por un momento, Heather preguntó si nos encontrabamos bien, lo cual Carla respondió que si, ahora nos encontrabamos a oscuras.. y para colmo nuestros ojos no estaban acostumbrados a la oscuridad, ya que habíamos venido de afuera, y teníamos la luz encendida para ver...)

Carla: Heather, TK... aqui no hai ratones, certo? ... Como vamos a salir de aqui? Odio la oscuridad, los ratones y ... creo que empiezo a tener claustrofobia.

No se preocupen, no creo que hayan ratones, y si los hay ellos te tienen tanto miedo a ti, como tu a ellos

(Seguramente habían ratones, pero si se lo afirmaba de seguro iba a ponerse a gritar o algo así, tal vez..... saqué de mi bolsillo el celular, abriendole la tapa para iluminar un poco al menos con la pantalla del mismo.. ahi pude distinguir a Carla en el piso, ahora me daba cuenta masomenos de lo que había pasado, que suerte que tuvo ella de que no le hubiera caido completamente ensima el estante...)

La has sacado barata realmente Carla..

(Me acerqué a ella para ayudarla a levantar, luego miré a Heather, levantando el celular para iluminarla aunque no directamente a los ojos..)

Tu te encuentras bien?

(Le pregunte)

Si tienen celulares saquenlos así iluminamos un poco esto...